Los estudiantes hacen preguntas, comentarios o se comportan de manera que son a veces difíciles de manejar en el contexto de la educación sobre drogas, o en otras áreas curriculares. Un ejemplo de ello es cuando los estudiantes expresan información personal sobre su propio consumo, otra situación es cuando los estudiantes muestran su preocupación por la situación de algún familiar o de algún amigo. Este tipo de situaciones pueden representar «obstáculos» para algunos profesores que no se sienten cómodos al hacer frente a estos temas.

En algunos casos, sin embargo, los comentarios, preguntas y comportamientos de los estudiantes están motivados por un deseo de llamar la atención y desviar el centro de atención de la clase o actividad. Otro objetivo puede ser desacreditar o atacar al profesor o a su mensaje. Los profesores deben ser conscientes de esto así como de los tipos de «trampas» y «juegos» que pueden plantear los estudiantes. Estando preparado, se puede convertir un «juego» o una «trampa» en una oportunidad para aumentar el aprendizaje.

Las «trampas» pueden ser frases, preguntas o comentarios. Los «juegos» son extensiones de las «trampas». Son más largos, más lentos y más provocativos. Aunque la intención del juego es similar a la de la trampa, el juego requiere que se reconozca a un ganador .

Los juegos y las trampas van desde lo obvio y elemental a lo sofisticado. Operan tanto a niveles verbales como no verbales.

¿Como podemos hacer frente a los juegos y trampas? ¿Como podemos diferenciarlos de las preguntas o preocupaciones sinceras. Lo siguiente es una sencilla estrategia de cuatro pasos desarrollada para hacer frente a los juegos y trampas.

Identifique la conducta, pregunta o comentario problema

Estos temas pueden tener relación con los hechos que se están tratando, con actitudes o creencias, con personas concretas, y/o con la relación alumno/profesor. Además, junto con el significado manifiesto puede haber una intención oculta. Por ejemplo, en una situación donde un estudiante, Juan, presenta los resultados de una investigación sobre los efectos a corto plazo de la marihuana, Susana puede decir, «¿Que hay de malo en la marihuana?, Yo conozco mucha gente que la consume y no ha tenido ningún problema».

Los temas que se pueden desprender de este planteamiento son: efectos a corto y largo plazo de cualquier droga, riesgo relativo, la actitud alarmista de los adultos o un desafío a la credibilidad y a los motivos del profesor (¿Qué sabrá Ud. de la marihuana?).

Evalúe el propósito o la intención subyacente y decida si está justificado tomar alguna medida después de la clase

¿Está Susana tratando de minar la credibilidad de Juan? ¿Se está jactando de su consumo? ¿Está intentando que usted defienda el no consumo?

Si su evaluación de la situación sugiere que es un incidente normal de la clase, no será necesario hacer nada especial después de la misma. Si considera que puede ser motivo para iniciar un proceso de evaluación de la joven, debería «tomar nota» de su razonamiento para dejar constancia de cara al seguimiento del caso. En el contexto de la educación sobre drogas los estudiantes que presentan este tipos de obstáculos pueden ser consumidores de alguna droga y necesitar ayuda.

Si cree que el estudiante puede estar teniendo problemas debido al consumo de drogas o debido al consumo de drogas por parte de algún miembro de su familia, la normativa de su escuela debería proporcionar información sobre cómo proceder (ver el Módulo 2.1). De forma similar, si sospecha que el estudiante puede estar implicado en el suministro o venta de drogas, la normativa disciplinaria de su escuela debe indicar qué hacer.

Acepte la conducta, pregunta o comentario del estudiante

Se recomienda que el profesor agradezca la preocupación del estudiante, sea empático y, si es oportuno, ofrezca la oportunidad de comentarlo después de la clase.

Si cree que Susana está intentando tenderle una «trampa», por ejemplo, llevarle a una defensa personal del no consumo, en lugar de apoyar la toma de decisiones por parte de los estudiantes, no caiga en ella. Puede asentir con la cabeza o bien agradecer el comentario y responder. Debe evitar enfrentamientos, etiquetar al estudiante o ponerle agresivo.

Responda

Identificando el problema subyacente, ofrezca soluciones alternativas y/o explore el tema y/o retome el control de la situación, dependiendo del motivo que perciba para el comentario.

En nuestro ejemplo usted podría retomar el control de la situación respondiendo de la siguiente forma: «Susana dice que no ve nada malo en consumir marihuana porque conoce algunas personas que la consumen sin haber tenido ningún problema, escuchemos el resto de la presentación de Juan y luego las opiniones de otras personas de la clase».

Tanto la forma como el contenido de sus respuestas a los «juegos» y «trampas» son importantes. Su forma debe ser natural, con un tono uniforme y con confianza. Esté atento al lenguaje de su cuerpo. El contenido de sus respuestas debe ser claro, asertivo, y no amenazante.

Actividad 3.3

A continuación hay siete ejemplos de conductas de estudiantes en sesiones de educación sobre drogas. Elija las dos que le parezcan más «trampas» y «juegos» y describa cómo podría hacerles frente en su clase.

Utilice el método de los cuatro pasos. Recuerde, sus objetivos deben ser:

  • Responder a todos los temas importantes planteados por el estudiante.
  • Mantener el control y la credibilidad en la clase incluso cuando le provoquen.
  • Convertir un obstáculo en una oportunidad y en un momento educativo.
  • Manejar con eficacia las cuestiones de disciplina e intervención fuera de clase, en una situación de cara a cara.
  1. Está moderando un debate en clase sobre los riesgos del consumo de marihuana. Los estudiantes dan respuestas basadas en su información general sobre esta substancia. Uno de los estudiantes dice que la marihuana no puede ser perjudicial porque está legalizada en Amsterdam. ¿Como respondería?
  2. Sus estudiantes están observando a otros compañeros que ensayan el rechazo de invitaciones utilizando frases preparadas por ellos mismos. Uno de ellos interpone un comentario de sabelotodo, cuando el que está ensayando la negativa dice su frase. ¿Qué hará usted?
  3. Durante una discusión sobre los riesgos de conducir bajo los efectos del alcohol, un estudiante, riéndose, comenta que su padre le dice que conduce mejor después de unos tragos que la mayoría de la gente sin beber. Usted conoce a la familia y sabe que el padre tiene problemas con la bebida. ¿Cómo le responderá?
  4. Una de las tareas que les ha asignado a sus estudiantes es un trabajo en grupo para que conozcan los servicios ofrecidos por diversos recursos comunitarios. En uno de los grupos uno de los estudiantes no quiere colaborar porque dice que es un trabajo estúpido. El estudiante se dirige a usted y le pide que le asigne otra tarea alternativa. ¿Qué haría usted?
  5. Usted está explicando los efectos peligrosos del fumador pasivo. Un estudiante, sentado de forma desgarbada en su sitio y agitándose, cuestiona la validez científica de su comentario. Dice que no hay evidencia de que fumar pasivamente sea nocivo y que no es peor que la contaminación atmosférica. ¿Como le responderá?
  6. Los estudiantes están trabajando en una actividad educativa, y usted escucha lo que un especialista les está diciendo sobre por qué la gente consume cocaína. Uno de los estudiantes parece alardear de cómo la cocaína ayuda a su hermano a tocar mejor la guitarra. ¿Cómo puede usted reconvertir esta situación?
  7. Usted está dirigiendo un debate donde se contrastan las ventajas e inconvenientes de consumir una droga frente a los de no consumirla. Uno de los estudiantes le pregunta si usted ha consumido alguna vez drogas. ¿Qué le responderá?