Más de 10.000 escolares de todas las edades participan este curso en diferentes programas de salud y prevención de drogodependencias ofertados por el Ayuntamiento de Vitoria.

Estas actividades, incluidas en la guía «Aprendiendo salud» que facilita desde el curso 2000-2001 el Consistorio a los 64 centros educativos que hay en la capital alavesa, intentan abordar en el medio educativo problemas claves como el hábito al tabaco («Clases sin humo»), la bebida («Guía Kontrohol») o la alimentación incorrecta («Desayuna bien» y «Aliméntate bien»).

Aunque todavía no existen datos definitivos por encontrarse aún en marcha algunos programas, la aceptación en el mundo educativo parece palpable, según se desprende del balance presentado ayer por la concejala de Asuntos Sociales, Marian Castellanos, donde se especifican las acciones realizadas por su departamento en la legislatura que termina.

En el curso 2000-2001 los diferentes planes sólo llegaron a 8.565 estudiantes, padres y profesores. Sin embargo, un año después alcanzó a 12.868 y en los tres primeros meses de 2003 ya supera los 10.000.

Especial mención merecen las actividades centradas de manera específica en la prevención de drogodependencias, tanto destinadas a los escolares -principal grupo de riesgo- como a la población en general. De hecho, el Ayuntamiento ha puesto en marcha en esta legislatura un plan de acción con 81 acciones de diferente índole.

Tercera edad

El resumen de los cuatro años de gestión registra un aumento del 47% del presupuesto de todo el área municipal de Asuntos Sociales, en relación a 1999, según señala Castellanos. Este incremento ha permitido incluso duplicar en este periodo las partidas destinadas a programas de la tercera edad y a acciones para conseguir la inserción social de los grupos más desfavorecidos, como personas sin techo, presos o inmigrantes.

«Vitoria no había impulsado tanta política social como en los últimos cuatro años», aseguró ayer la edil popular. «Quizá hemos hecho cosas mal, pero hemos hecho muchas más cosas bien», añadió.

Entre estos logros está el aumento del número de vitorianos ocupados, que a finales de 2002 se situaba en 136.500 personas. Y es que en este cuatrienio se ha producido una significativa reducción de la tasa del desempleo, que ha pasado del 13,8% al 7%, en una política en la que «se ha favorecido más que nunca la contratación de las mujeres», apuntó Castellanos.