La Junta, a través de la Consejería de Sanidad, prevé realizar a lo largo de este año un total de 14.600 inspecciones para el control de la publicidad, la promoción, venta y consumo de bebidas alcohólicas y tabaco, según los datos facilitados a Europa Press por fuentes de la Consejería. Esta actuación se enmarca dentro de las medidas que desde la Consejería de Sanidad se llevan a cabo para prevenir el consumo de drogas en la Comunidad y que incluye, además 19 planes locales sobre drogas a través de los que se canaliza gran parte de las acciones preventivas que se llevan a cabo en la región.

Asimismo, se desarrollarán programas de prevención escolar, en los que participan en la actualidad 25.000 alumnos de Enseñanza Obligatoria, y de prevención familiar, a través de las escuelas de familia, en las nueve provincias de Castilla y León, así como medio centenar de escuelas deportivas para la prevención de la drogodependencia y once programas de ocio nocturno alternativo. Entre 1999 y 2002 se han celebrado en Castilla y León 140 escuelas anuales de familia en las que han participado 2.150 padres y madres; un millar de adolescentes ha participado en las escuelas deportivas y 37.000 jóvenes se han beneficiado del programa de ocio nocturno alternativo.

En el caso de Castilla y León, la implantación de los programas y actuaciones preventivas en los centros escolares es mayor en Castilla y León que en el resto de España ya que mientras que el 74 por ciento de los escolares de la región ha tratado el tema del consumo de drogas en clase, la media nacional es del 62 por ciento. El consumo de drogas ilegales se encuentra estabilizado en Castilla y León en unas cifras por debajo de los promedios nacional, aunque el consumo de cannabis y éxtasis está en expansión.

En el caso del cannabis el crecimiento se aprecia desde 1994 mientras que en el caso del éxtasis el crecimiento en el consumo se aprecia desde 1998. Por lo que respecta al tabaco, el hábito de fumar desciende lentamente y está por debajo de la media nacional ya que desde 1989 los fumadores habituales han descendido en más de un 20 por ciento, además de que mientras que en 1996 la proporción de estudiantes de Castilla y León que fumaba a diario era de 2,2 puntos por encima de la media nacional y en la actualidad está un punto por debajo.

Asimismo, entre la población con edades comprendidas entre 14 y 18 años se observa una tendencia descendente en el consumo de bebidas alcohólicas, que es más frecuente entre los jóvenes durante los fines de semana.