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La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias ha presentado la publicación de un estudio realizado en Canarias sobre ‘Sustancias adictivas y adolescencia’, a través del cual se pretende facilitar la efectividad en las intervenciones que prevengan el consumo de sustancias en la adolescencia.

Esta investigación ha sido promovida y financiada por la Consejería de Sanidad a través de la Fundación Canaria para la Prevención e Investigación de las Drogodependencias (FUNCAPID) dependiente de la Dirección General de Atención a las Drogodependencias, y ha sido realizada por el Colegio Oficial de Psicólogos de Las Palmas.

Fruto de esta colaboración, el pasado mes de julio se presentó la reedición financiada por la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias de otras tres publicaciones sobre drogodependencias en mujeres elaboradas por el Colegio de Psicólogos de Las Palmas. La información obtenida facilita a los profesionales el diseño de programas preventivos que satisfagan las necesidades particulares de la población femenina de las Islas en materia de drogodependencias.

Portada del libro

La investigación sobre Sustancias Adictivas y Adolescencia presentada hoy recoge las valoraciones, experiencias y recomendaciones de jóvenes, progenitores y educadores canarios sobre el consumo de drogas en los adolescentes. La investigación se ha llevado a cabo en centros educativos públicos y concertados del ámbito de la Comunidad Autónoma de Canarias, en islas capitalinas y no capitalinas y en diferentes entornos: urbano, rural, centro y periferia.

Mediante la técnica de grupos focales se analizaron los conocimientos, actitudes, experiencias y motivaciones de los jóvenes canarios de centros de enseñanza secundaria y de adultos implicados en su socialización y educación (padres y profesores) sobre el consumo de sustancias psicoactivas en la adolescencia; además de las recomendaciones que ofrecen para hacer efectiva la prevención. Este estudio permite conocer cómo enfocan los adolescentes de ESO y Bachiller el uso de sustancias psicoactivas. Además, muestra cómo abordan los progenitores el fenómeno de las drogas con sus hijos y cómo percibe el profesorado el consumo de drogas de los adolescentes que educan.

La escasez de investigaciones en el área de las drogodependencias de tipo cualitativo hacen que no se haya explorado la riqueza de sus datos y la interpretación de los afectados considerando las valoraciones, opiniones y recomendaciones de los adolescentes, progenitores y formadores acerca del consumo de sustancias en la adolescencia. Esta modalidad se convierte en un importante complemento de los estudios cuantitativos.

Para esta investigación, se recogieron datos de primera mano y sin intermediación mediante técnica grupal en la que los participantes comprendían el significado de la naturaleza interna  de las cosas de modo intuitivo, mediante la exposición de las actitudes, sentimientos, creencias y reacciones que pueden ser reveladas con más facilidad por la vía de la reunión y la interacción.

En 35 grupos (181 adolescentes, progenitores y educadores) de 6 centros educativos de Canarias  se ha recopilado toda la información derivada de lo que han revelado los jóvenes y adultos con respecto a su enfoque acerca del consumo de sustancias psicoactivas en la adolescencia, permitiendo orientar actuaciones preventivas que sean efectivas y realmente logren revertir la tendencia de consumo actualmente observada.

La investigación se ha llevado a cabo desde una triple perspectiva: integral, de género y participativa. El uso de sustancias entre géneros juega un papel diferencial, de esta forma se puede determinar las especificidades de mujeres y hombres para aumentar la efectividad de las posteriores intervenciones.

Entre los resultados emanados de este estudio destacan las coincidencias mostradas entre estudiantes, progenitores y profesorado en cuando a las percepciones, valoraciones y recomendaciones. En este sentido, las partes referidas consideran prioritario recibir información actualizada sobre los efectos perjudiciales y consecuencias negativas de las sustancias. Los tres colectivos reconocen el papel esencial de la familia en la prevención y manejo del consumo de sustancias en los adolescentes y la necesidad de mejorar su preparación en ello. Asimismo, reconocen que el centro educativo es un marco idóneo para que el alumnado tenga acceso a información y comunicación de riesgos de sustancias.