Mitigar la violencia en los centros de narcotráfico en América Latina
El informe ‘Mitigar la violencia en los centros de narcotráfico en América Latina – Informe sobre América Latina No. 108‘ de International Crisis Group señala que la violencia relacionada con el narcotráfico en América Latina se concentra en áreas urbanas específicas donde confluyen mercados criminales, pobreza, debilidad institucional y redes delictivas organizadas. El documento recalca que, si bien el narcotráfico contribuye a la violencia, no es su única causa: factores como la corrupción policial y la falta de oportunidades socioeconómicas también alimentan los ciclos violentos. En lugar de estrategias punitivas generalizadas, se destaca la necesidad de intervenciones dirigidas en zonas críticas, que prioricen la reducción de la violencia por sobre la erradicación del narcotráfico.
Descripción
Descripción
El informe ‘Mitigar la violencia en los centros de narcotráfico en América Latina – Informe sobre América Latina No. 108‘ de International Crisis Group señala que la violencia relacionada con el narcotráfico en América Latina se concentra en áreas urbanas específicas donde confluyen mercados criminales, pobreza, debilidad institucional y redes delictivas organizadas. El documento recalca que, si bien el narcotráfico contribuye a la violencia, no es su única causa: factores como la corrupción policial y la falta de oportunidades socioeconómicas también alimentan los ciclos violentos. En lugar de estrategias punitivas generalizadas, se destaca la necesidad de intervenciones dirigidas en zonas críticas, que prioricen la reducción de la violencia por sobre la erradicación del narcotráfico.
El documento propone una serie de políticas públicas basadas en evidencia, como intervenciones focalizadas en puntos calientes, reformas policiales orientadas al control territorial legítimo, e inversión en programas sociales en comunidades vulnerabilizadas. También enfatiza la importancia de la coordinación entre gobiernos locales, nacionales y actores comunitarios, así como la construcción de capacidades institucionales. Se aboga por un enfoque pragmático, multisectorial y basado en resultados, que mitigue la violencia sin depender exclusivamente de medidas represivas.
Por ello, cualquier estrategia para mitigar la violencia debe incorporar un enfoque firme de derechos humanos. Se advierte que muchas de las políticas represivas implementadas en la región han generado graves abusos, incluyendo ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias y el uso excesivo de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad. Se hace un llamado a garantizar la rendición de cuentas, fortalecer los mecanismos de supervisión civil sobre la actuación policial y asegurar que las intervenciones estatales respeten la dignidad y los derechos fundamentales de las comunidades afectadas.