Vidas truncadas
Él era joven, alto, inteligente (casi parecía un genio), se dedicaba a lo que quería y era querido por todos. Y un buen día algo se torció, su novia se adentró en el mundo de la droga y, como pasa a veces, él le siguió. Ya nada volvió a ser igual. Estuvo en prisión un año, después de una redada en su casa y como siempre pasa en estos casos, no sólo le afectó a él, si no que provocó que a su familia le dieran la espalda “amigos” de toda la vida y que fueran señalados con el dedo (para la gente mayor una situación bastante difícil). Después de salir de prisión, todo pareció volver a la normalidad, trabajando en diferentes cosas, unas veces con más éxito que otras. Y de repente aparecieron las personas que habían roto su vida y les acogió en su casa. Todo fue a peor, con una depresión, apenas se levantaba de la cama, sin nadie que le ayudara pero rodeado de “gente” el hoyo se hizo cada vez más profundo. Pasaron los años y un buen día decidió cambiar de ciudad para alejarse de todo aquello, pero ya no había vuelta atrás, sus problemas de salud se habían agravado, positivo en VIH y con los pulmones gravemente enfermos, cualquier actividad se volvía casi imposible. Frecuentemente volvía a su ciudad para ir a médico, al principio evitaba a aquella gente que le había hecho tanto daño, pero poco a poco y cada vez más impedido empezó a quedarse cada vez más tiempo. Hasta que un día se fue y no se volvió a saber de él. Su familia intentó seguirle la pista y pasado un tiempo, después de 15 días sin saber nada, decidieron ir a buscarle. El resultado: había fallecido en su cama, sólo, desbalijado, sin nadie que se hubiera preocupado por él, rodeado de suciedad, jeringuillas y restos de haber consumido de todas las formas imaginables (nunca se supo si había sido él o sus “amigos”).
Una triste historia de algo que nunca debería haber sucedido, pero las drogas es lo que tienen que siempre se llevan a los mejores.
Historia de una vida truncada
Muchas veces pienso si podría haber hecho algo más por él. El año pasado en nochebuena nos ofreció a mi chico y a mi si queríamos una rayita, y ahora lo cuento y no se si tenía que haberlo contado antes. Bueno, todos sabemos que si él no quería no valían palabras, así que no hay porque comerse el coco.
Pues de la historia, lo único que me 'llega' no esq se muera por ser drogadicto o a su consecuencia. Creo que lo peor, seas o no toxicómano, porque morirnos nos vamos a morir todos, creo que lo peor es la soledad ante la muerte; morirte solo, sin alguien que te agarre a la vida de la que te vas.
Es triste. Pero bueno, ante desgracias así y sufrimientos así, compartidos, el único consuelo que queda, si esq queda alguno, esq descansando el que se va- que es el único que realmente pierde- descansan los que se quedan.
Es triste. Pero bueno, ante desgracias así y sufrimientos así, compartidos, el único consuelo que queda, si esq queda alguno, esq descansando el que se va- que es el único que realmente pierde- descansan los que se quedan.
Menudo lío que nos han armado.
Resulta que mi tío (no había dicho la relación que tenía con él) andaba con una pendanga que era la que le daba las drogas y le comió el coco para que cambiara el testamento, así que ahora además de dejarle solo, pues se quiere quedar con todo su dinero y sus propiedades (creo que antes deberían estar mi madre o mi abuela, que por cierto se sienten bastante burladas) pero como podemos demostrar que le tenía drogado y que él estaba enfermo pues vamos a impugnarlo. Espero que todo se solucione pronto porque mi madre y mi abuela están atacadas de los nervios.
Encima el otro día llamó la pilingui esa (lo siento no la soporto) a mi madre, así con 2 ovarios y le dijo que necesitaba dinero que si le dejaba que no tenía que darle de comer al hijo. JAJAJA que risa me da, mi madre hizo como que no sabía nada del testamento, hasta que la pilingui le preguntó que si había pedido las últimas voluntades, llámala tonta.
Además un amigo de mi tío nos contó que unos "amigos" se lo encontraron muerto y sentado en una silla y lo tumbaron en la cama, cogieron el ordenador y el móvil, y se fueron dejándolo allí. Me parte el corazón pensar que unos kinkis se hayan aprovechado así de una persona tan buena.
Perdón por el rollo pero tenía que desahogarme.
Resulta que mi tío (no había dicho la relación que tenía con él) andaba con una pendanga que era la que le daba las drogas y le comió el coco para que cambiara el testamento, así que ahora además de dejarle solo, pues se quiere quedar con todo su dinero y sus propiedades (creo que antes deberían estar mi madre o mi abuela, que por cierto se sienten bastante burladas) pero como podemos demostrar que le tenía drogado y que él estaba enfermo pues vamos a impugnarlo. Espero que todo se solucione pronto porque mi madre y mi abuela están atacadas de los nervios.
Encima el otro día llamó la pilingui esa (lo siento no la soporto) a mi madre, así con 2 ovarios y le dijo que necesitaba dinero que si le dejaba que no tenía que darle de comer al hijo. JAJAJA que risa me da, mi madre hizo como que no sabía nada del testamento, hasta que la pilingui le preguntó que si había pedido las últimas voluntades, llámala tonta.
Además un amigo de mi tío nos contó que unos "amigos" se lo encontraron muerto y sentado en una silla y lo tumbaron en la cama, cogieron el ordenador y el móvil, y se fueron dejándolo allí. Me parte el corazón pensar que unos kinkis se hayan aprovechado así de una persona tan buena.
Perdón por el rollo pero tenía que desahogarme.
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- Registrado: 24 Feb 2012 10:21