La campaña foral de prevención del consumo de alcohol de este verano ha dado sus frutos. Un total de 2.215 jóvenes adquirieron sus propios alcoholímetros en lospuestos de información habilitados por la Diputación foral en las fiestas de 15 importantes localidades de la provincia. Además, los bares colaboradores distribuyeron 837 aparatos medidores más a lo largo del verano, informó ayer en el pleno de las Juntas Generales la diputada de Asuntos Sociales, Ainhoa Domaica.
«El momento de la noche en la que se compraban los alcoholímetros era antes de coger el coche, lo que demuestra que ha calado en las conciencias de los jóvenes lo de la peligrosidad del binomio alcohol y carretera», indicó Domaica. Su departamento ha incidio más este año en el consumo de bebida de graduación que en las drogas debido a la entrada en vigor del carné por puntos.

La diputada del PP destacó la participación de los bares en esta campaña de prevencón. De los 80 establecimientos que visitaron los técnicos, 48 han ayudado a concienciar contra los excesos.