El Área de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Bilbao ha organizado para el domingo, Día Mundial sin Alcohol, la jornada «Alcohol y mujer», centrada en los perjuicios que causa el abuso de esta sustancia entre las mujeres y en el ámbito familiar del enfermo. El mensaje no podía ser más claro: «tenemos medios para salir», anunció Gonzalo MacGragh, jefe del Negociado de Drogodependencias del Consistorio en la presentación de ayer.

«Empiezas sin darte cuenta un día, otro día…». Así relató Katy cómo comenzó su relación con el alcohol. Todavía está en recuperación, pero con el ánimo suficiente para compartir mesa redonda con otras compañeras que pasan por el mismo «trance». «Una vez te das cuenta de que tienes un problema, debes asumirlo con toda tranquilidad». Aunque para muchas no resulta fácil, pues «está peor visto» que una mujer se vea envuelta en este mal. «Las características de la alcohólica son diferentes a las del hombre enfermo, porque el de ellas sucede en el ámbito doméstico, en la soledad, y el del hombre es más social», explicó MacGragh.

«Nosotros también sufrimos el problema», confesó Manuel, familiar de un alcohólico. El desconocimiento sobre la enfermedad, deriva en la falta de empatía hacia sus parientes. «Necesitamos una cura paralela y el grupo de autoayuda hace que nos sintamos bien, mientras ellos se van curando».

El próximo domingo, tres mujeres alcohólicas de la asociación La Cruz de Oro y de Santutxu junto a psicólogos responderán en una mesa redonda a una serie de incógnitas importantes para todo aquél que quiera conocer más de cerca este problema. De igual forma, familiares de personas afectadas por el alcohol contestarán a las mismas preguntas desde otro punto de vista. Cómo ha influido esta adicción en sus vidas, qué sienten cuando se les etiqueta de alcohólicas y cómo han vivido el tratamiento, serán algunas de las cuestiones que se pondrán sobre la mesa de 10 a 13 horas en la Sala de Conferencias del Área de Salud y Consumo (c/ Ugalde, 7).