La Ministra de Sanidad y Consumo ha presidido la inauguración de la primera sesión plenaria del Foro, celebrada el lunes en Madrid:

  • La Ministra destaca la importancia de la labor iniciada por el Foro, porque su esfuerzo contribuye a incrementar la sensibilidad social ante las drogas
  • En la actualidad, el foro está integrado por un total de 45 asociaciones, que representan a todos los sectores sociales, y ha establecido tres grupos de trabajo dedicados a “Jóvenes y prevención”, “Familia” y “Medios de Comunicación”, que han contado con el apoyo técnico de la Delegación del Gobierno para el PNSD
  • Los jóvenes quieren incrementar su participación activa en el desarrollo de programas de prevención y de ocio y proponen que el foro “Juventud y Drogas” tenga un carácter permanente
  • El grupo de “Medios de Comunicación” propone la creación de un Observatorio sobre el tratamiento de las drogas en los medios de comunicación y la implantación de códigos de buenas prácticas, que permitan incrementar la percepción social del riesgo para la salud del consumo de drogas y evitar su banalización

    La Ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, ha presidido esta mañana el acto de inauguración de la primera sesión plenaria del Foro “La Sociedad ante las Drogas”, en la que han participado más de 200 personas, representantes de las 45 entidades, organizaciones sociales y medios de comunicación que lo integran. Salgado ha estado acompañada en este acto por el Secretario General de Sanidad, José Martínez Olmos, y la Delegada del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Carmen Moya.

    En este encuentro, los grupos de trabajo del foro, constituidos en torno a tres aspectos fundamentales como son los “Jóvenes y Prevención”, “Familia” y “Medios de comunicación”, han presentado sus conclusiones preliminares, como punto de partida para el trabajo que tendrán que seguir desarrollando en el futuro.

    COLABORACIÓN DE LA SOCIEDAD CIVIL

    En su intervención, Salgado ha puesto de manifiesto la importancia de la labor iniciada por el foro, porque su esfuerzo contribuye a incrementar la sensibilidad social ante las drogas y permite la búsqueda de soluciones desde diferentes perspectivas. “La lucha contra las drogas requiere el esfuerzo y el compromiso de todos. Es una tarea que no es posible desarrollar con éxito tan sólo desde el ámbito de las Administraciones. La solución al problema de la drogadicción tiene que salir del conjunto de la sociedad”, ha señalado la Ministra.

    Para Salgado, esta labor adquiere una especial relevancia, especialmente si se tiene en cuenta la alta prevalencia del consumo de drogas en nuestro país, reflejada en el reciente informe del Observatorio Europeo de las Drogas. La Ministra ha insistido en el hecho de que los consumidores de drogas, sobre todo los más jóvenes “tienen más información que nunca sobre sus efectos nocivos, pero eso no ha supuesto una mayor interiorización del riesgo que supone la utilización de esas sustancias”.En este sentido, ha advertido que “es un error de gran trascendencia, que condicionará la intensidad de los consumos en el futuro”. Está demostrado que conforme desciende la percepción del riesgo, aumenta con el tiempo la intensidad del consumo de drogas, con los problemas para la salud que esto conlleva.

    Como ha explicado Salgado, el foro “La sociedad ante las drogas” se constituyó el pasado 24 de febrero, con el objetivo de crear un espacio de reflexión permanente “que permitiese dotar de mayor protagonismo a la sociedad civil con vistas a lograr una presencia creciente de la misma en una tarea que requiere el esfuerzo y el compromiso de todos”. Esta iniciativa del Ministerio de Sanidad y Consumo ha tenido una excelente acogida entre las entidades sociales que trabajan en la prevención del consumo de drogas y en la asistencia y reinserción social de los drogodependientes, así como entre los sectores educativos, empresariales, organizaciones juveniles, asociaciones de padres y medios de comunicación. Hasta el momento, un total de 45 organizaciones y entidades se han adscrito a este foro, cuyos integrantes han firmado un manifiesto en el que se comprometen a movilizarse contra el consumo de drogas y sus efectos negativos.

    POLITICAS DE PREVENCIÓN

    Entre las propuestas elaboradas por los grupos de trabajo del foro Salgado ha destacado, como la idea más repetida, la necesidad de dar prioridad a las políticas de prevención dirigidas específicamente a los jóvenes, así como a la formación de los profesionales. Asimismo, ha señalado la importancia de apoyar a las familias en su labor de prevención, avanzando en la implantación de políticas encaminadas a conciliar la vida laboral y familiar. A su juicio, esta tarea debe complementarse, incorporando al sistema educativo la prevención del consumo de drogas y la educación para la salud.

    En cuanto al papel de los medios, “que tienen una responsabilidad social como creadores de opinión”, Salgado ha subrayado el trabajo realizado por este grupo de trabajo, que se ha comprometido a luchar en contra de la banalización del consumo de drogas.

    PROPUESTAS DE LOS GRUPOS DE TRABAJO

    Tras la inauguración, los grupos han mantenido una primera sesión de trabajo en la que han perfilado sus documentos, que han sido ratificados posteriormente en la sesión plenaria. Entre las propuestas aprobadas, destacan las siguientes:

    Jóvenes y prevención.- Este grupo, integrado por representantes de entidades sociales, sectores empresariales y organizaciones juveniles de mayor implantación en el país, ha mantenido cuatro reuniones, en las que se ha puesto de manifiesto su voluntad de participar de forma más activa en el desarrollo de programas de prevención y de ocio. Este grupo ha elaborado un documento inicial de trabajo con las siguientes recomendaciones:
    Incrementar la participación de las entidades juveniles en los trabajos del Foro “La sociedad ante las drogas”.
    Constituir con carácter permanente este foro de la juventud y su papel en la prevención del consumo de drogas.
    Transmitir a todas las Comunidades Autónomas, Ayuntamientos y entidades que trabajan con jóvenes las recomendaciones y los documentos de trabajo que surjan de este foro.
    Las políticas de prevención y atención de los perjuicios derivados del consumo de drogas, en tanto que políticas orientadas a fomentar un alto nivel de protección sanitaria, de bienestar y de cohesión social, deben formar parte de las políticas públicas globales.
    Las políticas preventivas deben definir en sus planes de acción objetivos estratégicos que permitan, por medio de instrumentos e indicadores adecuados, una evaluación de resultados. Para ello, se plantea la necesidad de elaborar en un futuro criterios de calidad para acreditar programas para los jóvenes en los diferentes ámbitos de actuación preventiva.
    Se debería facilitar y mantener un canal de comunicación estable entre las Administraciones Públicas y la sociedad civil, asegurando el acceso a ámbitos de decisión en los diferentes niveles de estas Administraciones.

    Grupo de “Medios de Comunicación”.- Este grupo ha mantenido cinco reuniones y ha elaborado diversos documentos de trabajo. Además, se ha comprometido a la realización de un glosario de términos sobre drogodependencias para medios de comunicación y a la creación de un grupo específico de trabajo que elabore recomendaciones para los profesionales de los medios audiovisuales que trabajan en series de ficción y programas de entretenimiento.

    Asimismo, este grupo ha recomendado la creación de un Observatorio sobre el tratamiento de las drogas en los medios de comunicación y ha acordado con la Delegación del Gobierno para el PNSD la realización con carácter anual de un curso de formación para profesionales de los medios de comunicación y responsables de prensa y comunicación de las entidades sociales y ONGs que trabajan en drogodependencias.

    Con respecto a los documentos de trabajo que ha elaborado, el primero de ellos analiza de una forma sintética el tratamiento de las drogas en los medios de comunicación. En el segundo, denominado “Guía de buenas prácticas para profesionales de la información”, propone un decálogo para profesionales del periodismo, que tiene entre otros objetivos, evitar banalizar el consumo de drogas y sus consecuencias. Los documentos de este grupo incluyen las siguientes consideraciones:
    Los medios no pueden mostrarse indiferentes ante un grave problema de salud como es el consumo de drogas. Por el contrario, deben ejercer su responsabilidad social como creadores de opinión, implantando códigos de buenas prácticas o medidas de autorregulación que permitan incrementar la percepción social del riesgo para la salud que conlleva este consumo.
    Es preciso un compromiso por parte de todos los actores que intervienen en el ámbito de las drogas para potenciar el intercambio de información.
    Las drogas constituyen un fenómeno transversal, con múltiples facetas (sanitarias, educativas, económicas, legislativas y judiciales), por lo que los responsables de los medios deberían unificar criterios en el tratamiento de la información sobre drogas.
    La especialización de los profesionales está directamente relacionada con el rigor y el equilibrio del tratamiento informativo del problema de las drogas, por lo que es preciso fomentar la formación tanto de los profesionales de los medios como de los responsables de comunicación de instituciones y entidades sociales que trabajan en drogodependencias.
    El debate sobre los efectos de las drogas debe referirse al ámbito científico para no confundir a la opinión pública.

    Grupo de “Familia”.- Este grupo, integrado por entidades sociales que trabajan en prevención y atención a drogodependientes y asociaciones de padres y madres de familia, se ha reunido en tres ocasiones. El trabajo de este grupo aboga por una mayor implicación de las familias en la prevención de las drogas, y sobre todo en la prevención específicamente dirigida a los más jóvenes.
    El acercamiento a las familias ha tenido un carácter instrumental, condicionado por la posición de los profesionales con respecto a las familias. Por ello, se propone una aproximación a ellas más motivadora, que tenga en cuenta más lo que la familia demanda y pide.
    La familia actual participa del fenómeno de “desmotivación social” y una falta de adaptación a los nuevos perfiles de los consumos. Los profesionales deben esforzarse en incorporar a su trabajo en el mundo de las drogodependencias el marco de referencia de la familia. La ausencia de este marco puede estar en el origen de cierta desmotivación de las familias ante los problemas de las drogas
    Es preciso incorporar el tema de la educación como actividad fundamental para el abordaje de los problemas de las drogas, considerando la necesidad de proporcionar a la familia recursos o herramientas educativas.
    En línea con el punto anterior, la escuela se sigue mostrando como un escenario privilegiado para la actuación en prevención, por lo que la familia debiera incorporarse en su proyecto educativo.
    Dado que la problemática actual de las drogas es compleja y multidimensional, se requiere un mayor desarrollo de los niveles de coordinación entre las distintas administraciones, así como entre ellas y las ONGs
    Constatada la dependencia, casi absoluta, de la financiación de las ONGs por parte de las Administraciones Públicas, se apela a la necesidad de diversificar las fuentes de financiación, en aras de una mayor autonomía.
    Se considera de especial interés resaltar la necesidad de enfocar los problemas de “familia y drogas” desde una óptica comunitaria y de cambio social. Por ello, su abordaje pasa necesariamente por la implicación de toda la sociedad
    En el mismo sentido, se considera que las ONGs que trabajan en este ámbito deberían valorar su papel de responsabilidad y liderazgo dentro de esta transformación social.
    Se hace asimismo un llamamiento a las organizaciones para que desarrollen plataformas de intercambio y coordinación entre ellas, así como de interlocución entre las Administraciones Públicas.