A partir de ahora, si recibe alguna crítica por parte de su entorno debido a su hábito de beber un par de cervezas, puede «contraatacar» con los datos de un estudio en donde se ha observado que esta ingesta reduce un 58% el riesgo de desarrollar diabetes de tipo 2. No se trata de convertirse en un alcohólico, sino de realizar un consumo de alcohol moderado, y no hay que olvidar que también el ejercicio y cambios en el estilo de vida previenen esta patología.

La diabetes tipo 2 se caracteriza porque el cuerpo no produce adecuadamente insulina, una hormona necesaria para regular el nivel de azúcar en sangre y convertir esta sustancia en fuente de energía útil para nuestro organismo. Parece ser que pequeñas cantidades de alcohol ayudan al cuerpo a utilizar mejor la insulina.

Investigadores del Departamento de Nutrición y Epidemiología de las Universidades de Harvard (Estados Unidos) y de Londres (Reino Unido) han llevado a cabo un estudio con más de 100.000 mujeres de entre 25 y 42 años sin antecedentes de enfermedades graves como cardiopatías o diabetes, a todas ellas se les realizó un cuestionario sobre su estilo de vida e historia médica en 1989. Tras un seguimiento de 10 años, se detectaron 935 casos nuevos de diabetes tipo 2.

Tras analizar los datos, los científicos observaron que, comparadas con las mujeres abstemias, aquellas que consumían menos de una cerveza tenían una reducción del 20% en su riesgo de desarrollar diabetes. Los datos no acaban aquí, ya que este beneficio mejoró en las participantes que tomaban una diaria, una disminución del 33% y fue mayor en aquellas que ingerían de una a dos bebidas espumosas.

Estos resultados no pueden ser utilizados como excusa para beber todo lo que una quiera ya que en el estudio, publicado en Archives of Internal Medicine, también se observó que cuando el número de cervezas estaba entre dos y tres diarias, el riesgo sólo se reducía un 22% frente a las mujeres que no tomaban nada de alcohol. Además, los autores explican que «a pesar de esta asociación entre el consumo moderado y el menor riesgo de diabetes mellitus, no debemos olvidar el peligro potencial de la bebida en otros aspectos de la salud».