La Fiscalía General del Estado estudiará cómo actuar contra las tiendas que comercializan semillas y otros efectos para el cultivo de marihuana. O al menos así se lo ha pedido Gonzalo Robles, delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas. Robles dio a conocer ayer esta iniciativa en Madrid, dentro de un acto en el que exponía el anteproyecto de Ley de Prevención del Consumo de Alcohol.

El delegado del Gobierno admitió que las actividades de estas tiendas no están penalizadas aunque, según su opinión, pueden ser consideradas como apología de «una sustancia tóxica que abre la puerta a otros consumos».

Pablo Guarddon, uno de los propietarios de uno de estos establecimientos en A Coruña, el primero que se abrió en Galicia, consideró ayer que la actitud de Robles es «la constatación del fracaso de su agresiva política contra el cannabis, ya que cada año, sus propias encuestas reflejan el aumento del consumo en España. Además, resulta chocante que cuando media Europa se replantea su política con respecto al cannabis con iniciativas aperturistas, aquí, Robles se empeña en todo lo contrario». El último informe del Eurobarómetro situaba a España como el segundo país de Europa en consumo de cannabis, sólo por detrás de Francia y con un porcentaje de consumo habitual del 15% entre los jóvenes.

Los establecimientos a los que se refiere el delegado del Plan Nacional sobre Drogas han proliferado notablemente en los últimos cuatro años. En ellos se puede adquirir todo lo necesario para el cultivo de marihuana, desde las semillas a los abonos. Guarddon recordó que cualquiera de los artículos que tiene en su establecimiento, puede adquirirse libremente a través de Internet: «Aunque pudiera actuar contra las tiendas, Gonzalo Robles no podría evitar la venta de semillas o manuales. Sólo nos perjudicaría a las tiendas».

El delegado del Plan sobre Drogas se refirió ayer también a los preocupantes datos sobre consumo de alcohol entre los jóvenes, recordando que el 60% de los españoles entre 14 y 18 años efectúan consumos abusivos de alcohol y el 12% padecen ya consumos problemáticos. En ese sentido Robles cree que la Ley antibotellón, supondrá un punto de inflexión.