Desde la 00.00 horas de hoy, en la Comunidad de Madrid no se puede beber en la calle. A esa hora entró en vigor la Ley de Drogodependencias y Otros Trastornos Adictivos, conocida popularmente como ley del botellón, en virtud de la cual queda prohibido el consumo de alcohol en la vía pública y la venta de bebidas alcohólicas en gasolineras y áreas de servicio.

Esta Ley, única en España, fue aprobada el pasado 20 de junio por el pleno de la Asamblea de Madrid, por 52 votos a favor (del PP) y los dos en contra de los diputados socialistas presentes ese día en sus escaños, coincidente con la jornada de huelga general convocada por los sindicatos CCOO y UGT contra el llamado decretazo.

La normativa prohíbe el consumo de alcohol en la calle, salvo cuando se haga en terrazas, veladores, ferias y fiestas patronales, y cuando algún Ayuntamiento estipule lo contrario en su municipio.Prohíbe, asimismo, la venta de bebidas alcohólicas en las gasolineras de la región durante las 24 horas del día y obliga a los establecimientos donde el consumo de alcohol no es «inmediato» a solicitar una segunda licencia para venderlo, lo que está dirigido a restringir la venta nocturna de bebidas alcohólicas a menores en las llamadas «tiendas de chinos».

La ley sanciona las infracciones «leves» (beber alcohol en la vía pública o fumar en lugares prohibidos), con multas de entre 3.000 y 30.050 euros. Para las infracciones «graves» (las relativas a la publicidad de tabaco y alcohol) prevé sanciones de 30.051 a 60.000 euros; mientras que para las «muy graves» (vender alcohol a menores) fija multas que van de los 60.001 a los 600.000 euros.La ley también obliga a los facultativos a informar a los padres de los menores que sean atendidos por intoxicación de drogas legales o ilegales.