La ministra de Sanidad y Consumo, Ana Pastor, ha anunciado en Ginebra (Suiza) que durante el presente año se aprobarán nuevas medidas contra el tabaquismo, centradas especialmente en la publicidad del tabaco y en la puesta en marcha en el ámbito escolar de programas de información y educación para evitar que los más jóvenes se incorporen al hábito.

«A lo largo de este año se aprobarán nuevas medidas que tienen que ver con la información y la publicidad del tabaco; y también con los programas de educación en la escuela, y con los espacios donde se puede y no se puede fumar; y sobre todo con la sensibilización de todos los ciudadanos para que en aquellos espacios donde no se puede fumar no se fume, porque se están invadiendo los derechos de los no fumadores», señaló.

Pastor, que participó hoy en la reunión del Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aseguró que su Departamento propondrá la puesta en marcha de «todas las políticas que incidan directamente y sean efectivas» para disuadir a los jóvenes de fumar.

Tras recordar que en España fallecen anualmente 54.000 personas por causas relacionadas con el tabaquismo, lo que convierte a este hábito en un «problema fundamental de salud púlica», la titular de Sanidad abogó por «evitar que los jóvenes se incorporen poniendo en marcha todas las medidas que estén contrastadas científicamente».

En cualquier caso, indicó que todos los estudios disponibles en la actualidad concluyen que «las medidas aisladas no tienen ningún tipo de efectividad», y que las medidas más importantes «son las que tienen que ver con la educación y la información».

SUBIDA DEL PRECIO DEL TABACO

En relación con la posibilidad de subir el precio del tabaco para reducir el consumo de tabaco, el director general de Salud Pública, José María Martín Moreno, que participa también en la reunión de la OMS, explicó que la última reunión del Comité Nacional de Prevención del Tabaquismo se presentó un informe del Ministerio de Economía que analizaba el potencial impacto que tendría una subida de precios, concluyendo que sería «relativamente bajo» para la población general.

No obstante, aseguró que el tema «no ha quedado cerrado ni desde el punto de vista del Ministerio de Economía ni desde el de Sanidad», ni tampoco desde el de la citada comisión, de la que también forman parte otros departamentos, como Educación, Cultura y Deporte o Trabajo Asuntos Sociales.

«Desde el punto de vista de precios únicamente hubo una aproximación para ver cómo un aumento potencial del precio podría incidir en ese descenso del consumo y en qué grupos. La ministra nos hizo un encargo para que fuéramos recogiendo diferentes evidencias para elevarlas a los órganos oportunos, porque decidir subidas pertenece a la legitimidad del Gobierno», concluyó.