Los países de la Comunidad Andina (CAN) lanzaron hoy un proyecto por más de tres millones de euros, cofinanciado por la Comisión Europea, para diseñar políticas conjuntas de prevención del consumo de drogas sintéticas en la región hasta el 2010.
La iniciativa tiene el propósito de conseguir información objetiva y comparable que contribuya a que los andinos (Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú) desarrollen una visión de conjunto y construyan políticas públicas que permitan enfrentar el fenómeno de las toxicomanías.
Así lo explicó en la presentación del proyecto en Lima el «zar antidrogas» de Ecuador, Domingo Paredes.
La Comisión Europea (CE) aportará 2.550.000 euros al plan, mientras que los países de la CAN contribuirán con 510.000 euros.
Paredes, secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Control de Sustancias Estupefacientes y Psicotrópicas de Ecuador (Consep), dijo que «el uso y comercio de drogas sintéticas, aún siendo un fenómeno reciente y relativamente incipiente, ya es un hecho constatado y registrado en todos los países de la CAN».
Según cifras del bloque, sólo en Colombia se decomisaron 170.000 pastillas de drogas sintéticas en 2002, mientras que en Ecuador fueron 20.000 hasta septiembre de 2007.
El presidente ejecutivo de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas de Perú, Rómulo Pizarro, explicó que en su país hay 10.000 consumidores de estos estupefacientes, sobre todo entre las clases más altas, y se han detectado laboratorios clandestinos en Lima con una producción muy incipiente.
En Bolivia, el consumo de estas drogas es muy reducido, pero ya se registra principalmente en la ciudad de Santa Cruz (oriente), la más próspera del país, informó un documento de la Secretaría General de la CAN.
Como parte del proyecto, los andinos anunciaron también la convocatoria de tres concursos internacionales, dotados con 460.000 euros, en los que podrán participar instituciones dedicadas a la reducción de la demanda de drogas ilícitas.
El primer concurso solicita propuestas para el diseño e implementación de un programa de intervención temprana en poblaciones en riesgo y estará premiado con 200.000 euros.
La segunda convocatoria, dotada con 185.000 euros, es para instituciones privadas con el fin de realizar estudios en cada país miembro sobre el consumo de drogas sintéticas en las universidades.
Con esa información se busca conocer los patrones de consumo y factores de riesgo, para dar inicio a un Observatorio Virtual Andino de Drogas.
A su vez, el tercer concurso pretende promover la incorporación de investigadores al desarrollo de programas de reducción de la demanda de drogas de síntesis.
La mejor propuesta se hará acreedora de un viaje de trabajo, con los gastos cubiertos, a una institución de la Unión Europea, junto a un premio de 75.000 euros.
«Aspiramos a que, al culminar el proyecto a mediados del 2010, los países andinos estemos en capacidad de preparar planes de acción eficaces, mejorar los niveles de coordinación e invertir los recursos necesarios, especialmente en capital humano, para afrontar con éxito esta amenaza», puntualizó el «zar» ecuatoriano.
Participaron en el lanzamiento del proyecto en Lima el viceministro de Relaciones Exteriores de Bolivia y jefe del Consejo Nacional de Lucha contra el Tráfico Ilícito de Drogas, Hugo Fernández, y el director nacional de Estupefacientes de Colombia, Carlos Albornoz, además de Paredes y Pizarro.
