Una de las principales preocupaciones de los padres de adolescentes es tratar de mantenerlos ocupados en actividades que les alejen del tabaco, del consumo abusivo de alcohol y del resto de drogas consideradas más peligrosas. Pero ¿a qué clase de tareas es conveniente encaminarles?

Pues bien, según acaba de corroborar un trabajo recogido en la última edición de la revista «Pediatrics», la actividad deportiva parece ser la mejor vía para evitar este tipo de problemas entre los más jóvenes.

Los investigadores, un equipo de especialistas de la Universidad de Carolina del Norte (EEUU), llevaron a cabo una encuesta entre más de 12.000 estudiantes de todo el país en las que se hacían numerosas preguntas relativas a cómo estos chicos y chicas pasaban su tiempo libre.

En función de sus respuestas, se establecieron cinco grupos: el primero se dedicaba fundamentalmente a practicar deportes en compañía de sus padres, el segundo estaba constituido por patinadores y aficionados al monopatín, el tercero se declaraba un gran consumidor de televisión y de videojuegos, el cuarto llevaba a cabo actividades comunitarias (ayudar en grupos de voluntarios, por ejemplo) y el quinto formaba parte de equipos deportivos en el propio centro escolar.

Posteriormente, los autores del seguimiento llevaron a cabo una evaluación de la salud mental y física de estos adolescentes, así como de rasgos de su desarrollo y maduración que pudieran indicar posibles conductas de riesgo relacionadas con las drogas, fundamentalmente.

«Los jóvenes que pasaban mucho tiempo viendo la tele o usando videojuegos tienen más posibilidades de asumir estos comportamientos peligrosos», concluye el estudio. Por el contrario, «las actividades físicas no sólo mejoran su salud; también ofrecen beneficios emocionales, sociales y cognitivos, además de alejarles de todos estos problemas», especifican los responsables del mismo.

PARADOJA

Los investigadores han llamado la atención sobre un aspecto curioso de la investigación. Siempre se ha creído que los adolescentes que están demasiado tiempo en la calle, sin la supervisión de personas adultas, corren más riesgo de adoptar conductas de riesgo con respecto al alcohol, las drogas, las relaciones sexuales, el tabaco…

No obstante, según las observaciones de los científicos estadounidenses, los patinadores, un colectivo que pasa muchas horas fuera de casa y que a priori podría ser presa fácil a la hora de caer en estos problemas «presentaban unos niveles altos de autoestima y fueron menos propensos a comportamientos de riesgo», explican.

Por otra parte, han recordado que los jóvenes que consumen demasiado tiempo delante de la tele pierden oportunidades para relacionarse con los demás y desarrollar herramientas de socialización, así como para adquirir la capacidad de trabajar en equipo. Por todo ello, las autoridades deberían favorecer la actividad de los más jóvenes. Si es en grupo mejor.