Ángel Lizarraga tiene 33 años y desde pequeño ha sufrido de asma. «Por mi condición no puedo fumar, aunque cuando tenía 18 años era adicto al cigarrillo; pero pasé por una crisis en la cual por poco pierdo la vida y no tuve otra opción que dejar el vicio. Sin embargo, he pasado a convertirme en un fumador pasivo, pues en los restaurantes es común ver a las personas con un cigarrillo. También en los autobuses y hasta en las clínicas hay quienes fuman a escondidas, porque no se pueden contener. Lo peor es que la gente que cae en la adicción no mide las consecuencias negativas para su organismo y para quienes están a su alrededor», dice.

La falta de conciencia entre cientos de personas que consumen de forma desmedida el cigarrillo fue el motivo que impulsó la creación de un proyecto para la Ordenanza Municipal sobre Ambiente Libre de Consumo de Cigarrillo en el Municipio Guaicaipuro, que fue aprobada ayer en primera discusión por la cámara edilicia.

Según el concejal Hugo Figueroa, la propuesta pretende eliminar el consumo de productos derivados del tabaco en las instituciones educativas de nivel básico, diversificado y superior, en los medios de transporte público, en las oficinas y dependencias de administración pública y privada, en los locales comercia les cerrados, así como en las bibliotecas y espacios públicos.

«Con esta nueva normativa los propietarios de los restaurantes deberán disponer de un área no mayor de 10% del espacio total del establecimiento comercial para la ubicación de los fumadores. El lugar debe tener su respectiva señalización, además de estar ventilado, de lo contrario, serán sancionados con una multa de 25 uni dades tributarias, que equivalen a 835.000 bolívares. En caso de que incurran en la falta se ordenará la clausura del local», dijo el edil. También los conductores de las unidades de transporte público que permitan el consumo de cigarrillos, aún cuando muestren carteles que indican la prohibición de esta actividad, serán multados 5 unidades tributarias, es decir, 167.000 bolívares. Los propietarios de las empresas, oficinas o comercios que no obliguen al cumplimiento de las señalizaciones de prohibición de fumar deberán pagar 1.172.500 bolívares, en un lapso no mayor de 15 días, a la Oficina Receptora de Fondos Municipales. Figueroa explicó que el proyecto se fundamenta en un informe estadístico del Ministerio de Salud que indica que 4 millones de adultos son consumidores de cigarri llo y que 20% de la población adolescente del país, que cursa entre sexto y noveno grado de escuela básica, también fuma. «Más que imponer severas sanciones, el fin de esta iniciativa es crear conciencia sobre cuán perjudicial es el consumo de los productos derivados del tabaco, además de contribuir a mejorar la calidad de vida de los residentes de la jurisdicción», expresó.