A partir del próximo uno de enero, los comercios tendrán prohibido por ley vender cualquier tipo de bebida alcohólica a partir de las 24:00 horas, enfrentándose a sanciones mínimas de 1.500 euros y máximas de 150.000 euros si hay reincidencia en el incumplimiento.

La prohibición, incluida en la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos, fue anunciada ayer por el conseller de Comerç, Josep Juan Cardona, y las conselleras de Salud, Aina Castillo, y Presidencia, Rosa Puig, y los tres coincidieron en señalar que esta restricción puede ser una medida -«que no la única», matizaron- efectiva en la lucha contra el «botellón» que practican los adolescentes.

Y es que, según expuso Castillo, una encuesta realizada por la Delegación de Gobierno en Balears revela datos que, a juicio de la consellera, evidencian la necesidad de actuar en prevención. Así, según refleja la encuesta, el 73% de los adolescentes de 14 a 18 años ha tomado alcohol alguna vez y, de ellos, el 53,4% lo había hecho en los 30 días anteriores a ser encuestado. Asimismo, el 53,4% ha admitido que ha conducido bajo la influencia de bebidas alcohólicas en alguna ocasión y el 34% admite que alguna vez se ha embriagado de forma excesiva. Curiosamente, el 73,4% reconoce que sabe que el alcohol es perjudicial para la salud. El gusto de beber y la diversión son las principales causas del consumo.

En este sentido, los responsables políticos señalaron que se están estudiando medidas de prevención desde Salud y Juventud tendentes a reducir el consumo de alcohol entre los jóvenes. Así, Castillo adelantó que se está revisando el proyecto de Ley de Drogas que elaboró el anterior Govern y avanzó medidas restrictivas destinadas a proteger a los menores del alcohol.

La prohibición de vender todo tipo de alcohol en los comercios a partir de las 24:00 horas -que hasta ahora se limitaba a las bebidas con graduación superior a los 18 grados- afecta especialmente a comercios de zonas turísticas, gasolineras y las llamadas tiendas «24 horas».