La especialista del Laboratorio de Citogenética Ambiental de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) refirió que ella y su equipo estudian los efectos que causa el humo de tabaco, por su exposición y/o consumo, en el Ácido Desoxirribonucleico (ADN), con lo que se busca relacionar el daño cromosómico con cantidad de cigarrillos fumados por día, tiempo de consumo y niveles de nicotina y cotinina presentes en diversos fluidos biológicos.

La idea principal del estudio, precisó, es determinar los efectos que ocasiona el humo del tabaco, sobre todo, en los fumadores involuntarios, mediante la aplicación de diversas pruebas capaces de detectar daño citogenético.

«Aunado al humo del tabaco, debe tomarse en cuenta que los habitantes de la zona metropolitana (de la Ciudad de México) están también expuestos a la contaminación ambiental proveniente de vehículos automotores e industrias, entre otros», por lo cual en el estudio se incluirá la evaluación de individuos considerados como testigo (no fumadores) que vivan en la capital del país y en otras zonas de la República Mexicana en las que prevalezca un bajo índice de contaminación atmosférica, agregó.

La investigadora del Departamento de Ciencias Ambientales del Centro de Ciencias de la Atmósfera refirió que «hay numerosos estudios epidemiológicos en México que muestran estadísticas de muertes asociadas directa o indirectamente al tabaquismo», y el objetivo «que perseguimos es lograr un estudio que integre los efectos genotóxicos y de salud con la calidad del aire de ambientes intramuros contaminados con humo de tabaco».