Un equipo de investigadores de la Johns Hopkins University, dirigidos por la Dra. Laura Guay, trabajaron, entre 1997 y 1999, con nevirapina sobre un total de 619 mujeres seropositivas, a las que dividieron en dos grupos. Uno, recibió nevirapina y el otro un tratamiento con dosis múltiples de zidovudina (AZT), durante la gestación. Sus hijos lo hicieron durante sus primeras semanas de vida.

Entre las seis y las ocho semanas de edad, se dieron 56 nuevos infectados entre los que tomaron la dosis múltiple en comparación con los 36 entre los que recibieron nevirapina. Transcurridos 18 meses, las cifras aumentaron en los dos grupos, 75 casos en el primero y 47 en el segundo. Cuando cumplan los cinco años, se les realizará una nueva comprobación.

Los resultados obtenidos evidencian un descenso del 41% de los casos de nuevos infectados entre los niños que tomaron el único medicamento en comparación con los que tomaron AZT.

Lancet 2003;362:859-68