Las adicciones no solo se reducen a las drogas y otras sustancias. Por esa razón, por la existencia de otro tipo de adicciones -al juego, a Internet, o al sexo, por ejemplo-, los esfuerzos de la Dirección de Drogodependencias, adscrita a Sanidad, se centran ahora en incluir estas áreas en el circuito de servicios, subvenciones y ayudas, hasta ahora destinados exclusivamente a asociaciones que trabajan con toxicómanos y a adictos a distintas sustancias.

La directora de Drogodependencias, Celina Pereda, presentó ayer esta nueva vía de trabajo durante una comparecencia en el Parlamento. El plan fue aprobado hace escasos días en el seno del Consejo Vasco de Drogodependencias y se halla a la espera de diversos informes técnicos antes de tener el visto bueno definitivo del Gobierno. Este documento supone el preludio a una futura ley de adicciones, que buscará reconocer las nuevas realidades que crean este tipo de conductas.

De una ley que se está gestando a otra que ya ronda su medio año de aplicación. Pereda explicó además que, pese a que Euskadi es la comunidad autónoma en que más se está respetando la ley antitabaco, estrenada en el País Vasco el pasado 3 de enero, su dirección está a punto de abrir un expediente sancionador, el primero en seis meses, a un bar que ha seguido infringiendo la ley después de recibir un apercibimiento del Ejecutivo. Ocho establecimientos han recibido avisos similares desde enero. El bar ya tiene una segunda advertencia, pero Pereda explicó a los medios que se realizará una inspección y, tras ello, se podría abrir el expediente sancionador. Es el único caso de este tipo entre los 16.000 establecimientos hosteleros vascos.

A pesar de todo, la responsable de Drogodependencias hizo hincapié en la buena marcha de la implantación de la ley, que en abril pasado, por ejemplo, únicamente generó tres quejas en toda la comunidad autónoma.

Antes de la comparecencia de Pereda en la Comisión de Sanidad de la Cámara, representantes de la Coalición de Ciudadanos con Enfermedades Crónicas, la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica y el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo presentaron un documento que han consensuado en el que piden que Osakidetza financie los fármacos para dejar de fumar.

Sanidad ha rechazado esta posibilidad, aunque sí creará unidades específicas en una veintena de centros de salud de la comunidad autónoma para ayudar a abandonar el tabaco.

Estos colectivos pidieron igualmente un mayor esfuerzo de cara a regular el tabaco entxokos, sociedades gastronómicas y las lonjas que usan jóvenes, porque hoy en día se permite fumar en estos espacios y ello «incrementa el riesgo de consumo [de tabaco] en los jóvenes».

Los comparecientes defendieron que exponer a los niños al humo de tabaco «es una forma de maltrato infantil». Por ello, retomaron una medida que no se llegó a incluir en la ley: la prohibición de fumar en un vehículo privado si se viaja con un menor. Dado que el tabaco es «la primera causa de muerte evitable», pidieron a la Cámara que reconsidere su negativa a esta posibilidad.