Los distintos programas desarrollados por el Ayuntamiento de Salamanca en materia de drogodependencias han contado con la participación de 75.578 personas a lo largo de los últimos cuatro años, según el balance del Plan Municipal sobre Drogas presentado ayer por la concejala de Salud Pública, Josefa García, quien aseguró que se han destinado a estos programas 1.045.610 euros.

De ellos, el Ayuntamiento charro aportó 663.968 euros, el Plan Regional sobre Drogas 144.243 y el Plan Nacional 237.400. Las distintas actuaciones, explicó la edil, se han llevado a cabo en colaboración con asociaciones y se han centrado en tres ámbitos (prevención, asistencia e integración). El apartado más numeroso, tanto en actividades como en participaciones, es el que se refiere a los aspectos preventivos, especialmente en consumo de alcohol y tabaco. En esta área precisamente se enmarca el programa más demandado de todos, «Salamanca a tope», un plan que ofrece a los jóvenes una alternativa de ocio saludable durante los fines de semana y que durante sus tres primeras ediciones contó con 40.600 participantes. Esta actividad, que ahora celebra su cuarta edición, recibió 252.425 euros y este año contará con un presupuesto de 86.500 euros.

Dentro de los programas de prevención, destacan por otro lado las actividades de prevención del consumo de alcohol y tabaco en los centros educativos. De ellas se beneficiaron entre 1999 y 2002 un total de 2.760 alumnos. Asimismo, 4.558 niños y jóvenes en situación de desventaja social participaron en los programas de Educación de calle, consistentes en «la promoción social, educativa, laboral y de salud de esos adolescentes utilizando la calle como espacio de desarrollo y encuentro», señaló García Cirac.

Prevención

La prevención a través del deporte ha sido otro de los programas más mayoritarios, con una media de 300 participaciones a la semana y 9.000 al año. En este apartado, que gestiona la asociación Deporte y Vida, se trabaja en el fomento de hábitos saludables y sanos entre los escolares.

El tercer campo en el que hace hincapié el Plan Municipal sobre Drogas son los programas de inserción socio-laboral, desarrollados a través de asociaciones o entidades especializadas en drogodependencias. En ellos participaron en los últimos cuatro años ochenta personas, de las que el 43% aproximadamente concluyeron el proceso de inserción con éxito, según destacó la concejala.