Los jóvenes de entre 20 y 30 años que beben cantidades elevadas de alcohol tienen más probabilidades de sufrir un ictus cuando son adultos jóvenes que las personas que toman cantidades bajas o no beben alcohol. Es la conclusión de una reciente investigación publicada en la revista Neurology que hace suya la Conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana.

Cuatro de cada diez urgencias que atienden los hospitales por consumo de sustancias guardan relación con el alcohol. Durante el último ejercicio más de un millar de personas acudieron a los diferentes recursos con que cuenta Sanidad para tratar este problema en la provincia, de acuerdo con los informes de la Dirección General de Salud Pública y Adicciones. Supone un incremento próximo al 30% en el número de pacientes admitidos a tratamiento por consumo abusivo de alcohol.

Leer el artículo completo en elperiodico.com