Redacción-

El portal de noticias RNZ.co.nz de Nueva Zelanda, publica algunas declaraciones del Dr. Andy Towers de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Massey, donde comenta como ha afectado en el país el incremento de consumo de drogas, en mayores de 65 años, como anunciaba el informe anual de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes.

Según la Junta «el consumo de drogas entre los adultos mayores es una -epidemia- y ha aumentado el uso indebido de analgésicos, sedantes y tranquilizantes». Para Towers la suposición de que las personas mayores de 65 años no tocan las drogas «Es simplemente falso».

Pese a haber muy pocos datos en todo el mundo sobre las tasas de consumo en personas mayores de 65, Towers asegura que hay un aumento significativo del consumo, tanto en drogas legales como ilegales. «Hay cada vez más casos de abuso y dependencia del alcohol, y de otras drogas en entornos de jubilación, pueblos de jubilados. […] Hay personas que usan y comercian con drogas que tienen más de 65 años. Sabemos que las personas que han estado vendiendo drogas ahora se están jubilando, así que están en estos entornos y potencialmente también están vendiendo drogas». Para Towers ésta tendencia tiene que ver con la jubilación de una generación que consumió drogas durante los 60 y 70, y que ahora lo siguen haciendo.

La adicción más preocupante para Towers en Nueva Zelanda es el alcohol, «Sabemos que el 40 por ciento de los neozelandeses mayores de 50 años son bebedores peligrosos«, «Sabemos que probablemente estamos liderando el mundo en el número de adultos mayores de 50 años que beben peligrosamente. Ese no es un buen récord para Nueva Zelanda». Para Towers que el consumo de alcohol sea un problema de primer orden el país tiene que ver con la legislación de 1918 donde se obligó a los bares a cerrar a las 18:00, y que tuvo vigencia hasta 1967, esta ley «Moldeó a los neozelandeses como bebedores compulsivos… Hubo muchos resultados dañinos de eso, incluida la enseñanza de generación en generación de que beber en exceso era la forma de beber alcohol». Es especialmente preocupante el consumo de alcohol en estas edades donde es común estar tomando medicaciones, recetadas o no, que pueden tener sinergias muy nocivas para las personas consumidoras, comenta el doctor. 

El cannabis también ha entrado como una droga de consumo habitual en esta población mayor de 65 años. Según un estudio de trabajo y jubilación de la Universidad de Massey de Nueva Zelanda, el consumo de cannabis está presente en el 13% de la población mayor de 50 años. Pero para Towers el consumo de cannabis por sus características, le preocupa menos que el de alcohol «En realidad, el cannabis tiene relativamente menos daños que el alcohol, por lo que me preocuparía más en este momento que las personas mayores de 50 años consuman alcohol, y algunas consumen mucho alcohol»

Para Towers las personas mayores de 65% siempre han consumido drogas, pero ahora hay una nueva generación que consume nuevas sustancias y con nuevas pautas, pero los servicios de salud no los detectan porque suelen asumir que las personas de estas edades no consumen drogas.

«Entonces, en el primer paso, no se los considera consumidores de drogas y … Si lo son, no tenemos vías de derivación para adultos mayores. Muchos de nuestros servicios de salud y adicciones están realmente configurados para jóvenes, y cuando pones a los adultos mayores en esos servicios, no necesariamente funciona para ellos también. Entonces, tenemos estos enfoques de discriminación por edad que no reconocen que los adultos mayores necesitan ayuda, y no tenemos el apoyo que los atiende».

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