El tratamiento social de las drogodependencias continua siendo una de las áreas menos descritas en la intervención terapéutica con drogodependientes, sin embargo constituye un eslabón imprescindible para el abordaje integral de éste fenómeno y para que los tratamientos funcionen.
Teniendo en cuenta que las intervenciones deben centrarse en la consecución de objetivos realistas para los drogodependientes, necesitamos detectar qué aspectos sociales relevantes en su vida, presentan carencias, no sólo desde el punto de vista del profesional, sino contando con las necesidades sentidas realmente por el protagonista, así como con sus deseos de cambio. Todo esto nos permitirá ir descubriendo los ámbitos en que se centrarán las intervenciones y los programas que son necesarios utilizar en cada ocasión.
Algunos Aspectos a tener en cuenta para la elaboración de un Diagnóstico Social en los casos de drogodependencias.
1. AREA FAMILIAR Y DE LA CONVIVENCIA:
— Convivencia Actual.
— Lugar de Convivencia.
— Adecuación a sus necesidades.
— Antecedentes Familiares de marginalidad.
— Situación Actual de marginalidad:
· Acontecimientos desencadenantes
· Hechos mantenedores
El conocimiento de estos aspectos logrará situarnos en el entorno inmediato del drogodependiente, ofreciéndonos la oportunidad de conocer si sus necesidades básicas (vivienda, y relaciones de convivencia) están cubiertas, premisa imprescindible para plantearnos la primera intervención en cuanto a la drogodependencia. Si una persona no tiene cubiertos estos mínimos, ninguna intervención a nivel ambulatorio es factible en relación a la drogodependencia, por lo que tendremos que pensar en recursos en régimen de internamiento en los casos en que planteemos objetivos de abstinencia (Unidades de Desintoxicación Hospitalaria, Pisos de Apoyo al tratamiento, Comunidades Terapéuticas). Sin embargo si los objetivos perseguidos por el paciente no están en la línea de la abstinencia, el problema se agrava, porque la Red de Atención a las Drogodependencias no dispone (no es de su competencia) de recursos para dar cobertura a las necesidades básicas de los usuarios, y las Redes Sociales Generales no aceptan en sus Recursos a consumidores de drogas en activo, es importante que sepamos que la dispensación de un sustitutivo mejorará muy parcialmente la situación del drogodependiente, pero no deberíamos quedarnos ahí, sino que nuestra obligación es conseguir que éstos no sean excluidos de los recursos sociales generales a los que tienen derecho, por el sólo hecho de ser drogodependientes, y tratar de lograr más reducciones en sus padecimientos sociales que también son muy importantes.
2. AREA RELACIONAL Y DE OCIO:
— Composición del Grupo de relaciones.
— Actividades de Ocio.
— Aficiones.
— Adecuación a sus necesidades
3. AREA EDUCATIVA Y LABORAL:
— Estudios finalizados.
— Situación Laboral.
— Profesión.
— Adecuación a sus necesidades.
Para avanzar en el conocimiento del estilo de vida del drogodependiente, deberemos tener en cuenta otros aspectos como son, los círculos de relación, la ocupación, no sólo a nivel laboral, y el nivel de formación, para poder realizar un diagnóstico de intervención (si procede) a estos niveles, lo que permitirá el avance del paciente en su proceso de incorporación social.
4. AREA SOCIO-ECONÓMICA:
— Fuente de ingresos y cuantía.
— Adecuación a sus necesidades.
— Expectativas de cambio.
Esta información junto con la anterior, nos permitirá realizar un trabajo para la consecución de objetivos de organización personal y de normalización, así como prever si sus necesidades básicas están cubiertas. Ofreciéndole la oportunidad de utilizar programas dirigidos a la formación y al empleo, en su caso.
5. AREA JUDICIAL:
— Antecedentes judiciales.
— Situación actual.
Actualmente contamos con un buen número de drogodependientes con procesos judiciales pendientes y en libertad condicional. Estas situaciones es importante tenerlas presentes a la hora de plantearse objetivos a medio/largo plazo, porque el proceso puede ser interrumpido en cualquier momento en los casos de procesos judiciales pendientes.
Los drogodependientes que se encuentran en libertad condicional, por indicación judicial ya vienen marcados con objetivos de abstinencia, lo que obliga a los profesionales a enfocar en este sentido los tratamientos. Existen casos en los que el drogodependiente no desea absolutamente nada y acude a los Centros a realizar controles toxicológicos para no volver a la prisión; pero también contamos con otros usuarios, con los que podemos trabajar su proceso de incorporación social, ofreciéndoles la oportunidad de situarse en su nueva realidad y descubrir nuevas formas de organización, optimizando su asistencia a los centros aunque ésta haya venido impuesta por un juez.
Fdo.: Blanca Molina M.
Responsable del Departamento Social.
Centro Provincial de Drogodependencias de Granada.