En el proceso de recuperación de las conductas adictivas no es infrecuente que se produzcan caídas en el proceso de recuperación e igualmente recaídas.

Actualmente se diferencia la caída de la recaída. La caída es la ocurrencia de la conducta problema una sola vez en el tiempo sin que se vuelva a repetir. Esto es, la persona vuelve a consumir y al darse cuenta de ello pone todos los mecanismos en marcha para no continuar haciéndolo. En caso de que no haga frente a esta situación de forma activa volverá a su consumo anterior. En este caso se habla de recaída. Pero para que se de la recaída tiene que darse antes la caída, que también se puede denominar»desliz». Por ello hay que centrarse en la caída, si ocurre, para no llegar a la recaída. Y, remontar la caída es mucho más fácil que enfrentarse a una recaída.

Las caídas y recaídas suelen darse asociadas a estados emocionales negativos, como la ansiedad y depresión, a situaciones de estrés, ante el dolor, la presión social al consumo o a realizar la conducta y a la pérdida del control personal.

Si le ocurre una caída o recaída lo que debe hacer es:

  1. Deténgase, obsérvese y escúchese.
  2. Tranquilícese; no dé rienda suelta a sus pensamientos y sentimientos negativos por este incidente.
  3. Renueve su compromiso de abandono de su dependencia.
  4. Revise la situación que le ha llevado al consumo.
  5. Haga un plan para recuperarse inmediatamente.
  6. Pida ayuda, si ve que la precisa. Si cree que no puede superar por sí mismo su problema, otros podrán ayudarle eficazmente.