Redacción-

En el portal web de la organización australiana  Alcohol and Drug Foundation (ADF) se han publicado unas cifras sobre la incidencia del cigarrillo electrónico en Australia. La ADF es una entidad basada en la prevención de riesgos y reducción de daños en torno al alcohol y otras drogas, entre sus misiones se encuentra la de aumentar la percepción del riesgo con el alcohol y el tabaco entre adolescentes.

Las personas que usan cigarrilos electrónicos tienen tres veces más probabilidades de fumar tabaco que quienes no lo han usado. Este es el primer dato que comparten en el artículo «Vaping in Australia».

El consumo del cigarrillo electrónico en Australia ha ido en aumento, pasando de un 9% de consumidores en 2016 a un 11% en el 2019. Entre las personas que  habían probado alguna vez los cigarrillos electrónicos el 18% los habían usado al menos una vez al mes en comparación con el 10% en 2016. Y en el caso de los que lo usan a diario el aumento ha sido de tres puntos, pasando de un 6% a un 9%.

Entre las adolescentes de 18 a 24 años, el consumo de este tipo de productos, ha aumentado considerablemente. Entre las que ya consumían tabaco un 64% ha afirmado haber probado los cigarrillos electrónicos, frente al 49% de 2016.  Y el 13% de no fumadores que habían probado los cigarrillos electrónicos en 2016, se ha convertido en un 20% en 2019.

Sobre las adolescentes menores de edad, entre 12 y 17 años, comentan que un 14% han usado un cigarrillo electrónico alguna vez, y de estas el 32%  lo han usado en el último mes. También comparten los resultados sobre donde obtuvieron el último cigarrillo electrónico las menores de edad. Al 63% se lo ofrecieron amistades, al 8% hermanes, al 7% madres/padres y el 12% afirmaron haberlos comprado ellos mismos.

Alcohol and Drug Foundation recuerda que los cigarrillos electrónicos pueden normalizar el acto de fumar entre los jóvenes.

Australia es uno de los países con la legislación más estricta respecto a estos productos, y en el artículo recuerdan alguna de estas medidas:

  • Está prohibida la compra y la venta de líquidos que contengan nicotina.
  • Las personas que tengan una receta médica que justifique la compra de un líquido con nicotina podrán obtenerla a través de un acuerdo de importación especial.
  • Los cigarrillos electrónicos y los líquidos que no contengan nicotina se pueden vender y comprar legalmente en la mayoría de estados.

Desde lasdrogas.info hemos encontrado fuertes críticas de organismos de reducción de daños a la política australiana. Consideran que en práctica la ley imposibilita las terapias de abandono del consumo de tabaco con líquidos con nicotina. Actualmente las licencias de importación otorgadas son anecdóticas. En cambio Alcohol and Drug Foundation sostiene que no hay suficientes evidencias para promover el uso de cigarrillos electrónicos para dejar de fumar.

Articulo original de Alcohol and Drug Foundation en adf.org.au