Por primera vez en la historia del país, y tal como lo contempla una resolución del Ministerio de Salud y Desarrollo Social, la industria tabacalera deberá registrarse y registrar sus productos ante el ente gubernamental.
También por primera vez se conocerá la composición de los cigarrillos. Con base en estos datos, el Estado ordenará reducir la cantidad de algunos ingredientes que serían dañinos para la vida, o eliminarlos completamente, adelantó José Félix Ruiz, coordinador del Plan Nacional de Control y Prevención del Tabaquismo del despacho.
“De ahora en adelante, todo preparado de tabaco deberá tener un número de control, para lo cual las empresas deberán aportar datos sobre la materia prima, el papel del envoltorio, tipo de filtro, características del humo que inhala el fumador y del que sale de la punta del cigarrillo, existencia de tóxicos”, detalló Ruiz.
En principio, en el ministerio se han propuesto conocer de qué están hechos los cigarrillos.
“Una vez que lo sepamos, decidiremos la disminución de nicotina, cianuro, benceno, arsénico, amoníaco, plomo, mercurio y cadmio. Si son sustancias incompatibles con la vida, serán prohibidas. Aspiramos a que se pueda dar la discusión científica”, indicó Ruiz.
El Instituto Nacional de Higiene “será el receptor de la información de las tabacaleras, y su equipo técnico y profesional se encargará de las evaluaciones.
Esperamos poder regular los componentes este mismo año, porque hay sustancias radiactivas, sustancias relacionadas con la aparición de cáncer; también hay elementos como la nicotina, el factor adictivo del tabaco, y químicos que facilitan su absorción”.
El plan nacional de control y prevención del tabaquismo fue expuesto ayer en el XXXVIII Congreso Venezolano de Cardiología que se realiza en la isla de Margarita.
“Nuestra propuesta es integral, e incluye la regulación de los componentes, las restricciones a la publicidad, la protección de niños y niñas para que no empiecen a fumar, la atención del fumador para ayudarlo a dejar de fumar y la protección de la población no fumadora”.
En Venezuela, el gasto social generado por las enfermedades asociadas con el cigarrillo “alcanza 1,5% del Producto Interno Bruto”. El médico asegura que 55% de los fallecimientos por males circulatorios del corazón y el cerebro “se deben al tabaco, al igual que 80% de las muertes por daños respiratorios y 3 de cada 10 muertes por cáncer”.
Con respecto a la nicotina”, puntualizó, “debemos educar a la comunidad, con el fin de que se maneje que causa adicción”.
-¿Se ha pensado impedir su venta?
-No, pero sí, regular los productos que contienen tabaco.