Redacción-
La presencia del tabaco en el cine y la televisión, a veces pagado directamente por la industria tabaquera, ha contribuido notablemente en la percepción social del tabaco y en el fomento de su consumo. En 2012, el informe del Cirujano General de EE. UU. Encontró «una relación causal entre las representaciones de fumar en las películas y el inicio del hábito de fumar entre los jóvenes».
Por ello, en la edición Australiana del portal de noticias TheConversation.com, han publicado un artículo advirtiendo de la presencia del vapeo en el sector cinematográfico, ahora liderado por plataformas como Netflix o HBO. El artículo titulado Smoke screens: vaping on film looks less glamorous than the Hollywood smoking of yesteryear [Pantallas de humo: vapear en la película parece menos glamoroso que fumar en Hollywood de antaño] denuncian el impacto que esta tendencia puede tener en el consumo, a la vez que apuntan un cambio en su representación. En series como Mare of Easttown «se describe (el vapeo), como algo menos que glamuroso», en muchas escenas la protagonista vapea en situaciones de mucho estés y para escapar de situaciones de conflicto.
En el artículo destacan algunos ejemplos icónicos de la presencia del vapeo en la pantalla:
- The Tourist (2010), Johnny Depp usando un cigarrillo electrónico en un tren.
- House of cards (2013) El personaje de Kevin Spacey vapea en una habitación de lujo.
- Mare of Easttown (2021) La detective protagonista vapea continuamente en situaciones de estrés, y también consume cigarrillos.
El papel de la industria, es clave para entender el fenómeno. En el artículo recuerdan que en 2014, una empresa canadiense de cigarrillos electrónicos supuestamente pagó para que su producto fuera utilizado por la protagonista, interpretada por Milla Jovovich, en la adaptación cinematográfica de Cymbeline. Y sentencian «A primera vista, parece que la industria del vapeo simplemente está repitiendo las exitosas estrategias de marketing del tabaco del pasado».
Otro de los principales canales de promoción del cigarrillo electrónico que utiliza la industria es la presencia del vapeo en las plataformas de redes sociales, «es común e incluye pagar a usuarios de alto perfil para promover los cigarrillos electrónicos y los productos de tabaco», comentan en el artículo. El 29 de junio de 2021, el fabricante de cigarrillos electrónicos Juul, del gigante tabacalero Altria (empresa matriz de Philip Morris USA), fue multado en Carolina del Norte con 40 millones de dólares, por supuestamente comercializar su producto a adolescentes.
Si bien algunas de las principales compañías tabacaleras afirman que ya no pagan ni permiten que sus marcas de tabaco aparezcan en la pantalla, las representaciones de tabaquismo siguen siendo relativamente comunes, y con una alta audiencia de jóvenes.
En el artículo concluyen señalando una serie de medidas, que ya se aplican en Australia para la representación de fumar en las pantallas, y que podrían aplicarse igualmente a las representaciones de vapeo:
- Calificación de contenido para adultos si muestra el uso de cigarrillos electrónicos
- Certificado de que no se recibieron pagos por representaciones de vapeo
- Que las marcas de vapeo no sean identificables en la pantalla
Leer el artículo original en TheConversation.com