Naciones Unidas ha rebajado en 400 millones de personas las previsiones de crecimiento de la población mundial que hizo hace dos años, tras detectar un aumento de los índices de mortalidad debido al sida y a la reducción de los niveles de fertilidad, según revela un informe publicado por la División de Población del Departamento de Economía y Asuntos Sociales de la ONU.

El documento, que prevé que para 2050 habrá en el mundo un total de 8.900 millones de personas frente a los 9.300 millones previstos hace dos años, atribuye el descenso de la población a los efectos del sida, que ha disparado las tasas de mortalidad en muchos países.

A pesar de que la probabilidad de que el contagio del VIH se reduzca significativamente en el futuro, el impacto a largo plazo de la epidemia sigue siendo muy alto, dado que se espera que para el año 2050 hayan muerto más de 278 millones de personas debido a esta enfermedad, añade la ONU.

«El sida es una enfermedad de destrucción masiva», afirmó Joseph Chamie, director de la División de Población, durante la presentación del informe en el cuartel central de la ONU en Nueva York. En este sentido, aseguró que el número de muertes por la epidemia es más alto que el provocado por cualquier conflicto bélico de los últimos diez años.

La ONU destacó también que, a pesar del devastador impacto que tendrá la epidemia del sida, se espera que, por lo general, la población de los países más afectados haya aumentado a mitad del siglo, porque la mayoría mantiene niveles de fertilidad moderados.

Sin embargo, por primera vez en su historia, la ONU prevé que en el futuro desciendan a 2,1 hijos por mujer los niveles de fertilidad en los países más desarrollados, el nivel mínimo necesario para asegurar a largo plazo el reemplazo de la población.