Redacción-

En un artículo publicado en el New York Times bajo el nombre «Menthol Cigarettes Kill Many Black People. A Ban May Finally Be Near». Nos hablan del fenómeno que supone el consumo de tabaco mentolado entre la población afroamericana y la necesidad de regular un producto como este.

Como comentan en el artículo, los fumadores afroamericanos fuman menos que los blancos pero mueren más. Esto tiene que ver con que el 85% de las personas afroamericanas que fuman, consumen cigarrillos mentolados que generan una mayor adición.

«Los defensores esperan que el presidente Biden, cuya campaña tuvo un fuerte apoyo de los votantes negros y que ha puesto el abordaje de las inequidades en salud al frente y al centro de sus objetivos, pronto se pronuncie a favor de una prohibición.» Comentan en el artículo.

Una encuesta realizada en 2020 constató que el 6.5% del estudiantado afroamericano consumía puritos, principalmente mentolados, frente al 2.5% que consumía cigarrillos convencionales. Esto respalda lo que Philip Morris ya reveló en 1953, que el sabor mentolado en el tabaco es más atractivo para la población afroamericana que para la blanca.

La industria del tabaco lleva décadas promocionando los mentolados entre la población afroamericana, dando muestras gratuitas, descuentos y patrocinando eventos especiales como Kool Jazz Festival, además de publicitar los cigarrillos mentolados en revistas y periódicos dirigidos a público afroamericano y donar dinero a organizaciones civiles.

Ahora California presiona a Biden tras sumarse a Massachusetts en la iniciativa de prohibir la venta de todos los productos de tabaco aromatizados. Esto pone a la industria en una situación complicada, es contradictorio que las principales compañías de tabaco que estaban transformando la imagen de sus empresas en un negocio responsable que miraba para evitar el consumo entre jóvenes se oponga a la regulación de los cigarrillos mentolados.

«No parece muy transformador si no ha tomado ninguna medida para abordar un producto que particularmente ha dañado de manera tan desproporcionada y perjudicial a las personas afroamericanas», dijo Maura Healey, fiscal general de Massachusetts

La F.D.A. es la autoridad para regular la industria tabacalera, pese a sus múltiples intentos no ha podido tirar adelante la prohibición de los cigarrillos mentolados, debido a la fuerte oposición de la industria. Kaelan Hollon, portavoz de R.J. Reynolds, cuya marca Newport es la mayor vendedora de mentol en los Estados Unidos, dijo que una prohibición del mentol infringiría los derechos de las personas adultas que lo prefieren al tabaco puro. Pero actualmente la F.D.A. podría volver a proponer una prohibición federal, que debería ser aprobada por la Casa Blanca, ya son más de 120 localidades de EE. UU. las que han implantado prohibiciones a estos productos.

Una de las organizaciones que está presionando más en la dirección de la prohibición es Center for Black Heath Equity, una organización sin fines de lucro de Carolina del Norte. En el otro lado encontramos a la industria tabacalera que ha unido fuerzas con algunos activistas pro derechos civiles, como el reverendo Al Sharpton, que visitó comunidades  afroamericanas generando el temor de que una prohibición sería una escusa más para la policía para detener y registrar a personas afroamericanas.

Leer el artículo original en newyorktimes.com