Se trata, según explicó Miguel Marín, de un paso necesario para poder poner en práctica el convenio que la Ciudad Autónoma ya firmó anteriormente con la Fundación de Ayuda Contra la Drogadicción (FACD) a nivel nacional, y que está encaminado primordialmente a elaborar un programa integral de prevención de drogodependencias en todos los centros escolares que existen en nuestra ciudad.De ahí, ha dicho, la necesidad de firmar un protocolo con el MECD, organismo responsable de dichos centros escolares.
Fases
En definitiva, lo que se pretende es poner en marcha un programa que consta de tres fases; la primera de ellas es la realización de un curso de formación destinado a todos los profesores de enseñanza infantil, primaria y secundaria, que correrá a cargo de un experto docente de la propia FACD. El curso se impartirá durante los días 18 a 22 del próximo mes de noviembre en el Centro de Profesores y Recursos (CPR).
Posteriormente, ya en la segunda fase, se pretende que estos mismos profesores puedan poner en práctica todos los conocimientos que han adquirido en dicho curso previo, mientras que para finalizar, está previsto realizar un seguimiento periódico del programa a lo largo de todo el año.
Objetivo
El objetivo principal de este programa, ha explicado, “es reducir el consumo de alcohol, tabaco y sustancias ilegales, así como retrasar la edad de inicio en el consumo de las mismas”.
El desarrollo de este convenio, asímismo, va a suponer un desembolso por parte de la FACD de nuestra ciudad de unos 20.605 euros, mientras que, como contraprestación, esta misma fundación a nivel nacional aportará todo el material didáctico necesario para la realización del mismo, así como el seguimiento al que será sometido.
En total, según ha manifestado el viceconsejero de Sanidad de la Ciudad Autónoma, van a participar 22 centros escolares y 12.639 alumnos, a todos los cuales se les va a hacer entrega del material didáctico correspondiente.
Quesada
Por su parte, la directora del MECD se ha mostrado bastante interesada ante la puesta en marcha de este programa, sobre todo, ha dicho, porque tendrá una aplicación en el ámbito de la educación primaria, “algo importante ya que la prevención es quizá más importante que la actuación posterior”.
En opinión de Quesada, se pretende enseñar a los más pequeños “la importancia de tomar sus propias decisiones, lo que es bueno o no para ellos, así como a reafirmar su autoestima y enseñarle cómo puede incidir en su salud y en su futuro el consumo de estas sustancias que se empiezan a consumir desde edades tempranas”.
La directora de MECD, además, considera que la educación engloba todos los aspectos del ser humano, así como las necesidades sociales en donde se mueve, “es decir, no es solo instrución, sino mucho más amplio”.
Por ello, considera que “tal y como está ahora la sociedad y mirando los aspectos negativos que tiene la misma, hay que incidir en ellos desde la educación y desde la juventud”.
Prevención del problema
La puesta en marcha de este programa de prevención de la drogodependencia va a permitir a los profesores instruir a sus alumnos desde los 5 ó 6 años, ya que, en opinión de Quesada, es importante empezar a prevenir la aparición de este problema desde las edades más tempranas.
Para ello, lo que se pretende no es añadir una asignatura más en los estudios del menor, sino que lo que quiere es intentar intervenir en las materias normales de estudio de los alumnos, introduciendo aspectos educativos en las mismas.
El objetivo es intentar entrelazar este programa con los demás temas educativos y de estudio, con lo que se pretende implicar al alumno desde pequeño en el conocimiento de lo que es bueno, así como a enseñarle a controlar su emoción a no dejarse llevar por los demás, en definitiva, a tomar sus propias decisiones.