En entrevista con Radio Caracol de Colombia, el presidente Felipe Calderón se pronunció nuevamente en contra de la legalización de las drogas. «Si se legaliza, por ejemplo el precio tan alto que tienen las drogas en el mercado negro se reduciría y eso reduciría la capacidad financiera de los criminales, puede ser cierto. Pero liberar totalmente el mercado de drogas, incluso la propia reducción de su precio, son dos factores que van a impulsar a millones de jóvenes a consumir drogas.
«Yo no estoy de acuerdo con la legalización, no estoy de acuerdo porque si uno analiza, uno debe poner en la balance ese debate, las ventajas y las desventajas de una medida como ésa”, aseveró.
El Jefe del Ejecutivo federal explicó que su propuesta de debatir el tema, es porque hay democracia.
“Yo definitivamente estoy convencido de ello. Sí reconozco que es un problema complejo, que tiene muchas aristas; pero eso sí, a lo que no me opongo es a que se debata, que se analice, apuntando que, mientras esto no sea una medida universal, la verdad es que no veo verdaderamente ganancias en ello”, aseveró.
Comentó que hay una lucha desigual en México contra el narcotráfico, ya que no se pueden remover policías así se tenga la sospecha de que están implicados con el crimen y la corrupción.
“El sistema federal mexicano, valga la redundancia, es tan federal que si yo sé que hay un policía de un municipio que está coludido con los criminales y no tengo la evidencia judicializable, simple y sencillamente yo no puedo removerlo. Lo cual es una enorme desventaja. Es una lucha totalmente desigual. Si tuviéramos un sistema de una policía centralizada, como es la Policía Nacional de Colombia, y un sistema central, podría el director de la Policía Federal destituirlo inmediatamente, independientemente de que si hubiera evidencia judicializable, después procesarlo”, anotó.
Invita a dirigentes. El presidente Calderón dirigió una carta a cada uno de los presidentes nacionales de los partidos políticos para invitarlos a sostener hoy una reunión, en la cual se expongan de manera abierta sus propuestas dirigidas a enfrentar al crimen organizado.
«El propósito es consolidar una verdadera política de Estado a través de un diálogo franco, incluyente y constructivo que nos lleve, por encima de cualquier diferencia, a una posición conjunta frente a este enemigo común (el crimen)”, dice la carta.