¿Es cierto que bebiendo poco a poco e intercalando un vaso de agua entre copa y copa se evita la resaca?
La resaca viene determinada por la cantidad total de alcohol ingerido, por la calidad de dicho alcohol, y por las características genéticas de la persona que lo consume.
La resaca no la produce en exclusividad el etanol, sino también la adulteración de las bebidas con metanol y algunas sustancias que se forman en la elaboración de las bebidas alcohólicas. El denominado ‘garrafón’ suele llevar esa adulteración con metanol, además de gran cantidad de esas sustancias con fines adulterativos para intentar asemejar la bebida adulterada a la original aunque esta tenga un coste inferior, lo que produce mayor cantidad de productos tóxicos al producirse la degradación del alcohol que darán mayor “efecto resaca”.
Las características genéticas de cada individuo juegan un papel fundamental, que hacen que unas personas sean más sensibles que otras a los efectos del alcohol. La raza, el sexo o el peso son factores determinantes, aunque también la historia personal de consumo de alcohol puede hacer que cambien los efectos con el tiempo. La causa de que una persona ‘aguante mucho’ bebiendo sin que aparentemente se emborrache es que ha empezado a aumentar su nivel de tolerancia, pero en un determinado momento puede empezar a aguantar menos alcohol, debido a que su hígado empieza a dar síntomas de saturación y metaboliza a menor ritmo, es la llamada “tolerancia inversa”.
Un hígado sano elimina aproximadamente entre siete u ocho gramos de alcohol por hora, lo que equivale a un vasito de vino o una caña de cerveza, (120 miligramos por kilo y por hora), ya que el alcohol cuenta con una particularidad: el alcohol sigue una cinética de orden cero, es decir, su eliminación es constante, por tanto beber agua no aumenta la velocidad de eliminación aunque se orine mas.
No conviene mezclar alcohol con agua porque esta hace que el alcohol se absorba con mas rapidez, solo seria favorable en el sentido de que la copa que se bebe de agua no se bebe de alcohol y al final la cantidad de alcohol ingerida sería menor.
¿Qué bebidas provocan una mayor resaca?
Al final el tipo de bebida ingerida no es tan importante como la cantidad de alcohol ingerida. La mezcla de bebidas quizás pueda influir en las molestias gástricas del día posterior “día de resaca” ya que el alcohol irrita y erosiona la mucosa gástrica y la irritación será mayor cuando hay más componentes distintos procedentes de las distintas bebidas.
¿Qué alimentos ayudan a una mejor digestión el día después de beber? (Se
dice que los alimentos grasos van bien, ¿Es cierto?)
Las grasas pueden ser útiles antes de tomar alcohol ya que retrasan la absorción del mismo por el estomago, pero el día después de beber, con el estomago irritado no constituyen la dieta mas aconsejable ya que se obliga al sistema digestivo a trabajar más, lo más aconsejable es:
Ingerir mucho líquido por ejemplo zumos de frutas o caldos de verduras para rehidratar y reponer la perdida vitamínica y de electrolitos.
Durante el día tomar alimentos suaves como yogurt, café con leche, huevos por su contenido en cisteina o plátanos por su contenido en potasio.
Suplementos de vitaminas C o B son útiles tanto antes para prevenir como después para remediar (ayudan pero no evitan).
Unas tostadas muy quemadas podrían ayudar ya que su contenido en carbono hace de filtro en el estomago (efecto lavado de estomago), pero también pueden contribuir a aumentar el efecto de irritación de la mucosa gástrica.
Mitos a descartar
El alcohol no alivia la resaca sino que la empeora ya que es la misma sustancia que produjo el efecto toxico.
No beber nunca con el estomago vacío.
Beber a un ritmo al que el organismo pueda eliminar el alcohol de forma suficiente.
Comer a la vez que se bebe ya que la comida enlentece la absorción de alcohol en el estomago.
No hay ninguna sustancia que disminuya el nivel de alcoholemia en sangre. Las píldoras o medicamentos que a veces corren de boca en boca y aseguran que disminuyen los niveles de alcoholemia son meros mitos o publicidad comercial para aumentar sus ventas, no está probado científicamente que ninguna sustancia disminuya el nivel de alcohol en la sangre después de haberlo ingerido.
Firmado: Mª Trinidad Gómez Talegón
Experta en Drogodependencias, Especialista en Alcoholismo
Instituto de Estudios de Alcohol y Drogas
Facultad de Medicina. Universidad de Valladolid