Habría sido su próxima película. Pero no logró sobrevivirla. La muerte tocó su puerta 2006, antes de poder conjugar los elementos cinematográficos de su último trabajo. Joaquim Jordà quería en él mostrar la otra cara de la Transición, aquella que no aparece en los libros de texto pero que dejó una huella imborrable en aquellos que la vivieron y la sufrieron hasta la muerte.
Laia Manresa y Sergi Dies recogieron el testigo de su maestro para terminar su obra inacabada. Durante cuatro años y medio dieron forma a Morir de dia, un documental que relata la entrada de la heroína en Cataluña y los primeros casos de Sida en España. El filme, que se presentó ayer en el Club de opinión de DIARIO de MALLORCA, es una aproximación íntima a ese inexplorado capítulo de la historia contemporánea, narrada a través de testimonios de los que fueron sus protagonistas, y que acabaron fagocitados por su adicción
Pasaron de la ilusión al desconcierto. Y aunque fuera letal, fue una reivindicación de otra forma de vivir, instalada en una manera de entender la libertad personal. Con él Jordà quería rendir homenaje a los que fueron sus amigos y reflexionar sobre el entorno y la trastienda del mundo de la droga; desde sus inicios y sus consecuencias, desenmascarando la imagen mediática y el tabú que lo rodea, explica Laia Manresa, que es a su vez guionista de la película.
«Sabíamos poco de esa época porque no la vivimos así que tuvimos que ponernos a investigar», añade. Recuperaron numeroso material de archivo: diarios íntimos, fotografías, filmaciones en súper 8, grabaciones del colectivo videográfico video9, filmes personales, cartas…. para devolver la vida a los cuatro personajes en los que está centrado el documental. Los que les sobrevivieron ponen voz al guión que sus protagonistas dejaron escrito. Hablan de su experiencia, invocando recuerdos compartidos, desde un presente que les permite recolocar aquello vivido dándole un sentido nuevo y confrontándolo con un momento actual.
Su historia va más allá de la idea preconcebida de la drogadicción. Morir de dia desvela la humanidad que hay tras ella. La heroína es el hilo conductor, detalla Laia Manresa, desde el que se traza una línea social e histórica que va desde la muerte de Franco hasta el año 1992.
Recorrido
Para sus creadores lo más difícil fue el proceso de producción. Pero el esfuerzo les ha valido la pena. Aseguran estar muy contentos con el resultado y con la acogida que está teniendo el trabajo. Se presentó el pasado mes de mayo en el Palau d´Aimans de Barcelona y ya ha pasado por varios festivales.
Fue un largo proceso, pero con él han logrado saldar la la deuda que Joaquim Jordà tenía hacia todos aquellos que decidieron vivir su propio camino, en sus lindes, y llegaron a finalizar su recorrido.