Objetivo.
Determinar las creencias y motivos significativamente asociados con el consumo y no consumo de cannabis en escolares de la ciudad de Valencia, analizando diferencias en cuanto al sexo.
Material y métodos.
Diseño transversal. Participan 1.324 estudiantes con una edad media de 14,86 (DT = 3,17); 47,7% son hombres. Se utilizan las pruebas de χ2 y regresiones logísticas.
Resultados.
Negar que el consumo de cannabis afecta la salud física y mental y el entorno social está asociado con probar o consumir ocasionalmente o a diario cannabis; y creer que es bueno para lograr un objetivo se asocia igualmente con el consumo ocasional o diario. Los chicos señalan más que las chicas que el consumo es bueno para lograr un estado emocional u objetivo. Creer que «si controlas, no pasa nada» se encuentra asociado con el consumo experimental, ocasional y diario; y negarlo, con no probarlo nunca. Los motivos asociados con consumir son el de relajarse, divertirse y olvidar los problemas. El motivo más señalado para no consumir es porque perjudica la salud física y mental. Los chicos señalan más que no han consumido porque es caro y por convicciones personales de tipo moral; las chicas, por sentirse bien y saber divertirse sin drogas.
Conclusiones.
Es relevante reforzar las creencias sobre los efectos negativos del cannabis a nivel físico, mental y en el entorno social, aun cuando se percibe que se controla el consumo. Los motivos para reducir la tensión son potenciales para el consumo ocasional o diario; es por ello necesario enseñar o facilitar alternativas de ocio y relajación.