Los jóvenes andaluces toman menos drogas que hace ocho años y, en general, están más concienciados del riesgo que suponen para su salud, salvo en un caso, el alcohol: solamente un 25,3% considera que tomarse 4 o 5 copas el fin de semana puede causar bastantes o muchos problemas, según un estudio de la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social elaborado entre 2009 y 2010 con entrevistas a más de 2.600 jóvenes de entre 14 y 29 años.

Pese a ello, el alcohol es la droga que registra un mayor descenso en su consumo, un 7,8% menos con respecto a 2002, cuando la Consejería realizó el último estudio con las mismas variables. De los encuestados, el 55,3% asegura no haber participado en botellones en los últimos seis meses. Y de los que acuden a estas concentraciones, el 91,5% declara que ha bebido alcohol, en un mayor porcentaje de chicos que de chicas. “No sabemos si es porque las chicas tienen más pudor a la hora de decir que beben, como sí ocurre entre las mujeres adultas”, matizó ayer la consejera de Igualdad, Micaela Navarro, en una rueda de prensa.

Según la consejera, hay que continuar reforzando el control en la venta de bebidas a menores –más del 94% considera fácil o muy fácil encontrar alcohol– y apostando por la prevención, materia en la que la Junta de Andalucía invertirá este año más de 44 millones de euros.

Sobre el tabaco, un 38,1% de los jóvenes afirma que fuma diariamente, lo que supone un descenso del 0,6% con respecto a 2002 pero tres puntos por encima del porcentaje detectado en la población general en otro estudio reciente elaborado por la Consejería. El 48,7% de los jóvenes aseguran que no han fumado nunca y del 51% que dice que lo ha hecho alguna vez, casi un 7% lo ha dejado. Además, más del 86% considera que fumar un paquete cada día ocasiona bastantes o muchos problemas para la salud. “Antes no había tanta percepción de riesgo de adición ni de riesgo añadido para su salud, aunque hay que mantener prudencia y no bajar la guardia con estos datos”, insistió Navarro. El estudio también registra un descenso, aunque menor, en el consumo de las drogas consideradas como ilegales. La que más baja es el éxtasis (un 0,9% menos), seguida del cannabis (un 0,7% menos) y la cocaína (un 0,6% menos).

Edad de inicio

Décimas arriba o abajo, la edad de inicio se mantiene en el cannabis en torno a los 16 años y en el éxtasis, en torno a los 18. Donde sí se produce una mayor diferencia es en el consumo de cocaína: según el estudio, los jóvenes consumen por primera vez esta sustancia con menos de 18 años (17,71) frente a 2002, cuando la edad superaba la mayoría de edad (18,47). La edad de inicio en el consumo de alcohol y tabaco se mantiene entre los 15 y los 16 años.

Sobre el consumo simultáneo de varias drogas, sólo el 14,2% de los jóvenes encuestados reconocen seguir esta conducta. En el caso de los chicos el porcentaje asciende al 19,1%, frente al 8,9% de las chicas. Las anfetaminas, la cocaína y los alucinógenos son, según el estudio, las sustancias más vinculadas a patrones de policonsumo.