Redacción-

Un informe de Harm Reduction International (HRI) muestra como el número de países que implementan servicios clave de reducción de daños ha aumentado por primera vez en casi una década.

Más de 90 países en todo el mundo ahora tienen programas de intercambio de jeringuillas, afirma el documento, y 87 ofrecen terapia con agonistas opioides. Las salas de consumo ahora están operando en 16 países, y más de 100 países apoyan oficialmente la reducción de daños en sus políticas nacionales de drogas.

Pese al aumento, el informe deja claro que aún es insuficiente la cobertura, la escala y la financiación de la reducción de daños. Siguen existiendo enormes desigualdades entre regiones de un mismo estado y entre estados. Además, destacan que las personas que viven en zonas rurales están particularmente mal atendidas. La reducción de daños en las prisiones también sigue siendo limitada y ha visto poca expansión en más de una década, según HRI.

Los países que implementan más servicios de este tipo, están más concentrados en el norte global que en el sud, y por ello destacan de especial relevancia el crecimiento en el continente africano con 5 países más que incorporan servicios de reducción de daños.

También destacan en el informe el impacto de la Covid-19, la invasión de Ucrania por parte de Rusia o el control del Afganistán por parte de los talibanes.

Por último, la financiación está siendo insuficiente, y según el informe “En los países de ingresos bajos y medianos, la financiación para la reducción de daños es solo el 5 % del nivel necesario para satisfacer las necesidades de servicios estimadas para las personas que se inyectan drogas para 2025”.

 

Leer el artículo original en drinkanddrugsnews.com