Así lo manifestaron el fiscal Javier García Cabañas y el Inspector Jefe de la UDYCO, Juan Boveda, durante su intervención en el programa Contrapunto de Televisión Española en Canarias, que fue emitido este jueves y en el que puntualizaron que para el tráfico de heroína y pastillas de éxtasis se utilizan otras vías.

Afirmaron que en lo que va de año se han descargado en las Islas 10.972 kilos de cocaína, 3.200 de cannabis -de los que 500 lo fueron el pasado martes-, cinco de heroína y 3.200 pastillas de éxtasis.

Bóveda aseguró que, pese a la espectacularidad de las cifras, ésas se encuentran en «parámetros que se consideran normales», y explicó que no hay motivos para la alarma porque la mayor parte de estos contingentes han sido interceptados en alta mar y tenían como destino Portugal, Galicia y otros puntos del norte de España.

Explicó que se descargan en Canarias porque la Ley dice que tienen que quedarse en el primer puerto español por el que pasen y subrayó que en las islas no hay organizaciones tan poderosas que puedan financiar cargamentos tan grandes.

Sobre el hecho de que incauten miles de kilos de cocaína y hachís y muchos menos de heroína y éxtasis se debe, según el representante de la Fiscalía, a que Canarias está en una ruta clave para los países productores de estas sustancias.

Los dos responsables de la lucha contra el narcotráfico en las Islas comentaron que toda la droga que se incauta en Canarias «se destruye en las Islas» y que estos actos se desarrollan siempre en medio de fuertes medidas de seguridad.

Sobre la incineración de los cargamentos de droga, Juan Bóveda señaló que aunque se trabaja con profesionalidad «Canarias no cuenta con sitios completamente adecuados para que esas destrucciones se hagan de una manera rápida y menos tediosa. Sería importante -dijo- contar aquí con un horno crematorio más grande».

Bóveda agregó que el aumento en el número de aprehensiones (el doble que en 2002) se debe más «a la cooperación internacional y a la eficacia policial» que al aumento del tráfico, y Cabañas subrayó que es «imposible» saber la idea generalizada de que los alijos que se interceptan suponen sólo el 20 por ciento de todos los que circulan.

«Los cálculos que hacemos nosotros son en base a las superficies de producción y éstas han disminuido, pero que hay droga en la calle es obvio, porque la vemos a diario».

Ante el debate abierto sobre la posible legalización de las drogas blandas (hachís y marihuana) los especialistas señalaron que su misión «es hacer que se cumplan la ley y la de los políticos legislar».

«En cualquier caso todos los argumentos que dicen que la legalización traerá beneficios, como la reducción de la delincuencia, son perfectamente rebatibles», incidió García Cabañas

Sobre la presunta falta de medios materiales y humanos en las islas para poder luchar en igualdad de condiciones contra las mafias, el Fiscal Antidroga matizó que los recursos «son los que son» y no se puede estar eternamente como «plañideras».

Bóveda descartó en su intervención que el aumento de alijos incautados con respecto a años anteriores signifique que ha aumentado el consumo de sustancias estupefacientes en el Archipiélago.

«Los datos que tenemos -finalizó- indican que el consumo de algunas sustancias se ha estabilizado y otras, como la heroína, ha bajado. Lo que sí es cierto es que ha aumentado la población y eso puede conducir a conclusiones erróneas».