Está allí, al lado del polvoriento tablero verde, sin titubear. De frente y sin tapujos les habla a sus compañeros sobre las drogas y el alcohol. Lo hace con un grado de convicción que sorprende. Sus compañeros la escuchan y algunos hasta toman nota. Al final, Yesenia termina su exposición. «El objetivo es uno solo: la prevención», dice.
En su meta, sin embargo, no está sola. Desde hace 30 años, una institución de carácter privado empezó a dar los primeros pasos para hablar, precisamente, de la prevención. Todo en un país donde el tema parecía vedado al núcleo familiar y a algunas tertulias de amigos, claro está, al calor de unos buenos tragos.
«En ese entonces la cocaína, la marihuana y el alcohol, estaban presentes en la sociedad pero su abuso no parecía un problema social», recuerda Margarita Sánchez, quien lleva 26 de sus 30 años de vida al frente de la Corporación Colombiana para la prevención del alcoholismo y farmacodependencia (Surgir).
La entidad fue la primera del país que se creó para tratar el tema de la prevención del consumo de drogas y alcohol. Y hoy, 30 años después, con ayuda de jóvenes como Yesenia, cumple su labor desde la base: los estudiantes.
Todo a través de programas como «Retomemos…una propuesta para tomar en serio», que pretende reducir la vulnerabilidad de los jóvenes frente al consumo.
«Pero no es un trabajo de hoy. Durante todos estos años hemos tratado de hacerle entender a la sociedad que la prevención es el mejor camino», insiste Sánchez.
Surgir nació como asociación de carácter privado enmedio de los procesos de farmacodependencia en instituciones de salud pública que arrancaban en la ciudad. Varios sectores de la política y el empresariado empezaron a mirar el problema del consumo y el 18 de mayo de 1979, arrancó la corporación.
«En ese momento el asunto del consumo se manejaba hasta con inocencia. La idea que se tenía era que la sustancia era el problema y no el por qué de su uso», asegura Silverio Espinal, jefe de la división técnica de la institución.
¿Cómo lo hicieron?
Según sus administradores, entre los logros de la corporación durante los 30 años se destaca cómo el tema de las drogas no fuera un asunto tabú.
«Hacemos trabajo con madres gestantessobre prevención. También con niños, jóvenes y estudiantes que están propensos al consumo», insiste Espinal.
Entre las estrategias aparecen campañas publicitarias, conferencias, afiches y las investigaciones como el reciente Estudio Nacional sobre Consumo de Sustancias Psicoactivas en Colombia que develó como cada vez más niños y jóvenes consumen drogas a edades más tempranas. Incluso, cómo hoy unos 300 mil colombianos están en aprietos con el abuso de las sustancias.
«Cuando empezamos, la brecha de consumo, por ejemplo, de marihuana era de 9 hombres por cada mujer. Ahora es estrecha», asegura Espinal.
Por eso, para conmemorar sus tres décadas de trabajo, Surgir prepara una mirada retrospectiva de lo que ha sido la evolución del problema de drogas en Colombia. El estudio estará listo en septiembre.