Las personas con dependencia del alcohol son las que más acuden a centros del sistema público para iniciar un tratamiento con el fin de rehabilitarse, ha informado el Director General de Drogodependencias, Bartolomé Pérez, a partir de la Memoria Asistencial de 2002 en centros de la red pública.

Bartolomé Pérez ha añadido que en los meses de verano “aumenta sensiblemente” el riesgo de consumo, por lo que “han de extremarse las precauciones e insistir en la prevención, porque la información de calidad es la mejor vía para tomar decisiones libres y conscientes”.

El 44% de las personas tratadas por dependencia de las drogas en 2002 ha sido por adicción al alcohol, por encima de los opiáceos (26,80%) y cocaína (21,87%), apunta el citado informe de Bienestar Social.

En 2001, según esta memoria, también el alcohol suponía el motivo principal de los tratamientos (39,13%), seguido de opiáceos (37,41%) y cocaína (17,35%), una tendencia que cambió en ese año, ya que en 2000 los tratamientos obedecían, sobre todo, al abuso de opiáceos (42,98%), alcohol (35,72%) y cocaína (16,39%).

Asimismo, el director general de Drogodependencias ha resaltado la satisfacción en los centros de la red pública; así, de las 9.119 personas que han iniciado tratamiento para abandonar el consumo de cualquier droga –ha agregado Bartolomé Pérez- el 54,3% dice sentirse “muy satisfecho” y el 42,1% “bastante”.

El balance de Bienestar Social agrega que 4.015 personas han recibido en 2002 tratamiento para abandonar el alcohol, un 12% más de los atendidos el año anterior (3.589).

El informe también apunta que 2.293 usuarios de los centros de la red pública se han sometido, por primera vez en 2002, a una terapia con el fin de eliminar su dependencia del alcohol, mientras que el año anterior fueron 2.044.

Perfil del adicto al alcohol

El número de personas con alcoholemia que han recibido tratamiento por primera vez ha seguido la siguiente evolución: 2.293 en el año 2002, 2.044 en 2001 y 1.913 en 2000.

Según la memoria de asistencia en los centros, la edad media de las personas con dependencia del alcohol es de 42 años y, en el 53% de los casos, han formado su propia familia.

Además, el alcohólico tarda más de 19 años en comenzar su primer tratamiento para abandonar una droga que generalmente consume de modo exclusivo; sólo el 12% de los adictos al alcohol consume también cocaína y el 8%, cannabis.