El grupo de productores de vídeo «Lente Comunitario» y los jóvenes del colectivo de teatro «La Voz de Romero», se unen en el esfuerzo del rodaje del cortometraje que han denominado: «la historia de Teo», que es una producción salvadoreña independiente que cuenta con un bajo presupuesto pero cuentan con las ganas que le ponen a la producción estos jóvenes que se ve reflejado en la creación del escrito de la historia, las grabaciones, actuaciones y la edición del mismo, que se produjo en el municipio el Paraíso, Chalatenango.

En esta producción casera los jóvenes juntan sus habilidades en la elaboración de vídeos con la actuación generando una sinergia que le brindan una frescura al rodaje, como cualquier esfuerzo juvenil que se caracteriza por el ímpetu y el entusiasmo mismo.

«El objetivo del corto es contribuir al análisis de las realidades que en nuestro departamento Chalatenango están aconteciendo y hacer reflexión en la juventud… a los peligros a los que estamos expuestos con respecto al tráfico de drogas«, comenta el asesor técnico Jesús Gutiérrez, facilitador de la organización Cáritas Chalatenango.

La historia está basada en hechos reales de la cotidianidad que están expuestos los jóvenes de las comunidades de Arcatao, La Palma, La Reina, Agua Caliente, Tejutla todos en el departamento de Chalatenango, donde se han incrementado el fenómeno del reclutamiento de jóvenes por parte del crimen organizado que se recrudece en la zona. El personaje principal del cortometraje es Mateo un estudiante adolescente de una escuela pública proveniente de una familia humilde de un padre agricultor y una madre ama de casa.

La trama del cortometraje intenta combinar el romance con el drama que viven Mateo, su novia Liz y su familia frente a la presión ejercida por un grupo de traficantes de droga a la localidad.

«Esperamos que los jóvenes después de reconocer los problemas sociales, tengan el valor para alejarse de ellos, que la sociedad conozca que por medio de estas iniciativas se puede cambiar», declara Salvador Arévalo, director de teatro La Voz de Romero.

«Bueno, el corto nos ayuda a medir el nivel de aprendizaje y experiencia con el que contamos, también la historia nos muestra una de tantas formas de amenaza a las qué estamos expuestos los jóvenes por parte del tráfico de drogas», explica Carlos Merlos, director del cortometraje y parte de Lente Comunitario.

La producción del cortometraje además de contribuir a generar sensibilización de la problemática del tráfico de drogas, les permitió al grupo de jóvenes compartir experiencias e intercambiar conocimientos del mundo del vídeo y la actuación.

«Me sentí muy bien, es una experiencia nueva, emocionada, ansiosa, nerviosa, una combinación de sentimientos, sobre todo orgullosa del trabajo en equipo que se realizó. Es algo único, me sentí familiarizada con el personaje, desde el principio, y definitivamente disfrute mucho al actuar«, manifestó la joven Sofía Olla que actúa como Liz (la novia de Mateo) por primera vez en un rodaje.

El vídeo se proyectara en centros escolares de la zona, en círculos comunitarios, en festivales de video y estará disponible muy pronto en las redes sociales.