Los ministros del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y de Sanidad, Bernat Soria, han presentado los resultados de la última Encuesta Domiciliaria de Alcohol y Drogas, que ha arrojado datos positivos. A la caída del consumo de alcohol y tabaco, hay que añadir que por primera vez se retrasa la edad de inicio en el uso de estas y otras sustancias.

El consumo de drogas en nuestro país ha iniciado una senda descendente. España ha registrado en 2007 y 2008 las tasas más bajas de consumo de alcohol y tabaco desde 1997, según las conclusiones de esta encuesta elaborada gracias a más de 23.000 entrevistas.

Mientras que hace una década, el 46,8% de los españoles entre 15 y 64 años fumaba tabaco, el pasado año ese porcentaje cayó hasta el 41,7%. La ingesta de alcohol ha descendido algo más, casi seis puntos, del 78,5% registrado en 1997 al 72,9% en el último ejercicio.

El uso del cannabis, que es más popular ahora que hace 10 años, ha alcanzado, sin embargo, una cifra más baja que en 2003. Uno de cada 10 adultos entrevistados ha reconocido consumirlo.

El consumo diario de alcohol ha descendido más de cuatro puntos (10,2% frente al 14,9% de 2005) y el del tabaco más de tres (29,6% frente al 32,8% de 2005), especialmente en los hombres. Este descenso, aunque más contenido, también se registra en el consumo diario de cannabis, que baja medio punto (1,5% frente al 2% de 2005).

En cuanto a la cocaína, las cifras de la encuesta siguen situando a España a la cabeza de su consumo en Europa. La nota positiva es que el porcentaje de población que la ha tomado en el último año se ha estabilizado en un 3%, frenando así la tendencia alcista registrada entre 1995 y 2005.

También está estabilizado o comienza a descender el consumo de éxtasis, anfetaminas y alucinógenos, mientras que el consumo de heroína e inhalables volátiles se mantiene en niveles bajos en los últimos 12 meses, con prevalencias del 0,1%.

El policonsumo se confirma como una constante de los consumidores de drogas ilegales, especialmente entre los usuarios de cannabis, cocaína y heroína.

Aumento de la percepción de riesgo

Además de registrar descensos en el consumo de las tres drogas más extendidas en nuestro país, la encuesta refleja un retraso en la edad de inicio en el consumo de todas las sustancias. Así, el cannabis empieza a consumirse como media a los 18,6 años (18,3 en 2005), y la cocaína en polvo a los 20,9 (20,6 en 2005).

Además, continúa aumentando la percepción del riesgo y, por primera vez, disminuye la disponibilidad percibida por los adultos para todas las drogas, como ha subrayado Pérez Rubalcaba.

El riesgo percibido para el consumo ocasional de cannabis ha crecido en más de cuatro puntos y, aunque de forma más contenida, destaca por su relevancia el incremento cercano a un punto porcentual del riesgo percibido para el consumo ocasional de cocaína.

El titular de Interior ha recalcado el compromiso del Gobierno para minimizar el consumo de estas sustancias y ha justificado la presencia de ambos ministros en la rueda de prensa porque «Interior quiere actuar desde el punto de vista de la oferta y Sanidad sobre la demanda».

En este sentido, Sanidad tiene en su agenda la elaboración de la nueva Estrategia Nacional sobre Drogas 2009-2016, en la que ya trabaja la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas. Este documento marcará las prioridades de acción en este campo del propio ministerio y de las Comunidades Autónomas.