El viejo consejo para los menores de no hablar con desconocidos se traduce, en las nuevas tecnologías, en no responder a mensajes de procedencia no reconocible, ni dar información o identificarnos públicamente, así como conocer la existencia de riesgos, como el acoso y la pornografía en Internet.

La brecha digital entre padres y educadores y los menores, cada vez más duchos en el uso de los nuevos medios de comunicación, podría dejar a niños y niñas desprotegidos ante el acoso, la pornografía infantil o el robo, por citar algunos ejemplos. La supervisión de las actividades de los menores es clave.

Esta es la razón para que Orange haya lanzado la guía ‘Teléfonos móviles, Internet y TV: lo que los padres deben saber’, en la que se transmiten consejos y que se editará en papel (150.000 ejemplares más 500.000 dípticos) y se distribuirá en las tiendas de la empresa y otros puntos de entrega. También se puede acceder a través de la Red en formato PDF.

La guía tiene en cuenta que la comunicación actual es multimedia, es decir, que cualquier móvil de última generación permite navegar por la Red, que cualquiera puede publicar en un ‘blog’ o ver televisión a través del ordenador, por citar algunos ejemplos de convergencia de medios.

Por eso abarca distintos medios y recomienda atención activa e informada a padres y educadores. además del uso de filtros, adquiribles fácilmente en las tiendas o en la Red.

El texto, editado con apoyo del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio y con la colaboración de la asociación ‘Protégeles’ y el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, aconseja cosas como animarles a comentar cualquier cosa de les incomode o inquiete en el uso del móvil o el ordenador.

Respecto a los chat, es muy importante «no encontrarse nunca en persona con alguien a quien se haya conocido en un chat, a menos que el menor vaya acompañado de un progenitor». También señala que es peligroso abrir una webcam a un desconocido.

Los datos que maneja la asociación Protégeles son in quietantes. Según esta asociación, los casos de pornografía infantil a través de Internet crecen cada año en España un 10%, y la asociación cita estimaciones de Interpol a escala europea.

Según su presidente, Guillermo Cánovas, esta es la actividad delictiva más frecuentemente denunciada de las que se cometen ‘online’ y la que más crecimiento registra en los últimos años. Cada mes, esta asociación recibe una media de 1.500 denuncias de padres sobre actividades delictivas en Internet.