Según muestra un artículo publicado en «AIDS», investigadores de la Johns Hopkins University (Estados Unidos) han iniciado un estudio para evaluar si el antirretroviral nevirapina, administrado antes de mantener una relación sexual sin protección, puede prevenir la infección por el virus del sida. Datos de un estudio preliminar señalaban que esta estrategia parece segura, pero debe confirmarse si es efectiva.
Los médicos ya utilizan la estrategia llamada «del día después», consistente en administrar una combinación de antirretrovirales con objeto de impedir la infección en personas que se han expuesto recientemente al virus. Si embargo, la idea del nuevo estudio es ensayar la administración del fármaco justo antes de exponerse al VIH, y los investigadores creen que puede ser una estrategia muy efectiva.
Señalan que no se trata de sustituir al preservativo, sino ofrecer una alternativa a aquellas personas que, por el motivo que sea, no pueden utilizarlo, así como una forma de proteger a los usuarios de drogas inyectadas.
Los candidatos a la administración preventiva de nevirapina serían personas que, a pesar de las advertencias, se someten a comportamientos de riesgo durante ciertos períodos, caso de prostitutas en países pobres.