Una edición especial del programa de reportajes «1 equipo», de Cuatro , mostró ayer a las 23.00 horas la ruta que sigue la cocaína desde su cultivo en Bolivia. Doscientos millones de personas consumen drogas y si Estados Unidos es uno de sus destinos más habituales España se ha convertido en el mejor cliente del polvo blanco a escala de la Unión Europea. El consumo crece y deja una media de 500 muertes al año en esta industria ilegal que genera más de 357.000 millones de euros.

El programa muestra todo el proceso que sigue la cocaína, desde la recolección de la hoja de coca hasta el polvo blanco que se consume en Europa. Un equipo de reporteros viaja desde Bolivia hasta España en compañía de narcotraficantes, «chancheros», «capsuleros» y otros intermediarios que se juegan la vida por una «propina».

En este camino la periodista María Julia se traslada hasta Bolivia para conocer de primera mano el origen del negocio y convive con un cocalero que sobrevive, por un mísero salario de 17 euros al mes, gracias a la plantación y recolección de hojas de coca. Sin embargo, a medida que la cocaína va haciendo kilómetros, su precio aumenta hasta límites insospechados. Cuando la droga viaja a Argentina, a sólo 200 kilómetros de su origen, doscientos kilos de coca que antes se pagaba a 100 euros ahora cuestan 8.000 euros. Y si logra llegar a España, su precio se dispara hasta los 35.000 euros.

Una de las escalas obligadas en esta ruta de la droga es la costa gallega. La otra, el aeropuerto de Barajas. A ambos lugares se desplazaron reporteros del programa para averiguar la rutina del control de los alijos que intentan adentrarse en nuestro país de las formas más originales y temerarias.