La consejera de Sanidad y Servicios Sociales, Charo Quintana, ha presentado el Plan de Prevención y Control del Tabaquismo para los años 2004-2007, durante un acto en el que estuvo acompañada por el director general de Salud Pública, Santiago Rodríguez. Como objetivos generales, plantea reducir la prevalencia de tabaquismo, ya que unas 140.000 personas fuman en Cantabria, y proteger a la población del aire contaminado por humo.

En su intervención, la consejera afirmó que el tabaquismo constituye la primera causa de mortalidad prematura y de enfermedades prevenibles. Añadió que, de hecho, ocasiona más muertes al año que el SIDA, el alcohol, las drogas ilegales y los accidentes de tráfico juntos y que de las 56.000 muertes atribuibles al tabaco al año en España, 500 corresponden a Cantabria.

La Consejería de Sanidad y Servicios Sociales, considerando el problema del tabaquismo como uno de los programas prioritarios de Salud Pública, lo mismo que ha hecho la OMS y la Unión Europea, desde el año 2003 está impulsando una política integral para su control y prevención que se plasma en este documento, dentro también de los plazos que fija el Plan de Gobernanza.

Situación y objetivos

El Plan de Prevención y Control del Tabaquismo que presentamos, dijo la consejera, evalúa el porqué el consumo de tabaco es un problema, nos informa de la situación del tabaquismo en Cantabria y, además, se marca unos objetivos. En cuanto a lo primero, habló del problema sanitario como factor de riesgo de la enfermedad y como causa de muerte evitable tanto para los propios consumidores como para los fumadores pasivos, grupo éste último expuesto a la corriente de humo con mayor número de sustancias químicas nocivas, «un agente carcinogénico de primer orden causante de las muertes en fumadores pasivos, y que representa el 1% de las muertes atribuibles al tabaco».

Charo Quintana ilustró con cifras la situación del tabaquismo en Cantabria. De los datos recogidos se desprende que, en la Comunidad Autónoma, fuman en torno a 140.000 personas, el 36% de la población entre 15 y 64 años -algo inferior a la media nacional-, y el 35% de las chicas y el 25,5% de los chicos entre 14 y 18 años, lo que confirma la tendencia a la feminización en el inicio del hábito tabáquico. Precisó que la edad media del consumo por primera vez es de 13 años, y de 14 años y 3 meses para el consumo diario.

Entre los objetivos del Plan, la consejera apuntó los de disminuir la prevalencia; retrasar la edad de inicio del consumo; proteger a los no fumadores, creando espacios sin humo en los centros de trabajo; ayudar a los fumadores que deseen dejar de fumar, para lo cual se ha incluido en la cartera de servicios de Atención Primaria el programa de ayuda al fumador, e impulsar un cambio cultural y unas normas de conducta que releguen el hábito tabáquico a los lugares especialmente reservados para ello, además de la elaboración de una normativa que lo regule.

Líneas prioritarias

En todos estos aspectos abundó el director general de Salud Pública a lo largo de su intervención, quien se refirió a las líneas prioritarias de actuación. En primer lugar, se plantea la elaboración de una ley de prevención y control del tabaquismo en Cantabria, una vez que se aprueba la normativa estatal que ahora se está elaborando, y garantizar su cumplimiento, a través de las limitaciones en la venta y en el consumo; la regulación de la publicidad, promoción y patrocinio, y un régimen de infracciones y sanciones.

También se fomentará la creación de espacios sin humo, para proteger la salud de la población, limitando la existencia de lugares donde se pueda fumar, que alcanzará al 100% de los centros sanitarios y de las administraciones públicas; al 50% en los centros docentes y al 25% de las empresas, en 2005, con la aportación de la Consejería para asesoramiento, formación y deshabituación.

Deshabituación

Otras líneas apuntadas por Santiago Rodríguez van dirigidas a sensibilizar y formar sobre tabaquismo activo y pasivo a colectivos modélicos, mediante cursos de formación al personal sanitario del Servicio Cántabro de Salud (SCS), docentes, servicios de prevención de riesgos laborales, y empleados públicos, entre otros; ofrecer deshabituación tabáquica a las personas fumadoras de los colectivos médicos; además de potenciar la prevención del consumo de tabaco y la atención al fumador desde la Atención Primaria, y en la escuela y en el entorno familiar.

Por otro lado, el director general de Salud Pública señaló, entre las actividades previstas por el Plan, el desarrollo de Unidades de deshabituación tabáquica, para las personas que no lo consiguieron en Atención Primaria y grupos específicos de especial riesgo como los infartados o las embarazadas; la información y sensibilización a la población de los riesgos del tabaquismo activo y pasivo, y fomentar la investigación en áreas relacionadas con el consumo de tabaco.

Financiación

Finalmente, indicó que la Consejería financiará el Plan con 239.000 euros por ejercicio a cargo del presupuesto anual, y con el compromiso de mantener esta cantidad hasta el año 2007, 170.000 euros con fondos de cohesión del Ministerio de Sanidad, y aprovechando los recursos humanos y materiales de la propia Consejería de Sanidad y del SCS.

Actividades previas

Charo Quintana, por su parte, mencionó algunas de las actividades determinadas por el Plan y que ya se iniciaron en 2004, como la elaboración y desarrollo del protocolo para la transformación de la Administración Regional en espacio sin humo; los cursos de formación a 800 profesionales médicos y de enfermería en 24 Centros de Salud, a 25 delegados de Prevención de riesgos laborales y a 25 docentes; el concurso «Déjalo y Gana»; la participación de 800 alumnos de Secundaria y Bachillerato en el concurso clase sin humo, y la ayuda a la deshabituación de los trabajadores de la Consejería de Sanidad y de Atención Primaria que lo han solicitado.

Para el presente año, de momento 150 trabajadores de la Consejería de Presidencia y 251 de Atención Especializada se han inscrito con estos mismos propósitos, a los que probablemente se sumarán a partir de ahora otros colectivos de la Administración Regional interesados en seguir este programa.