Cedro revela que chicos desde los 12 años ya han probado la temible droga sintética. Expertos advierten que mezclar el estupefaciente con el alcohol puede ser mortal.

El éxtasis ya dejó de ser una droga exclusiva de los fines de semana. Hasta hace unos años, su presencia en el Perú se reducía a discotecas exclusivas, pues estaba al alcance de una élite que podía pagar 20 dólares por la pastilla importada de Europa. Sin embargo, ahora que ya se estaría produciendo en el país y que su costo es de ocho dólares, el escenario es preocupante: ha llegado a colegios y a domicilios de jóvenes, de todo nivel social.

La presencia de cárteles extranjeros de la droga en el Perú ha abaratado los costos, según el Centro de Información y Educación para la Prevención del Abuso de Drogas (Cedro). La institución presentó ayer un último estudio referente al consumo y dependencia de drogas en la población peruana, el cual ofrece datos alarmantes. Se estima que, hasta 2007, un 1.2% de la población habría probado la temida droga sintética al menos una vez en su vida.

Se ha confirmado, además, que el consumo es mayor entre los jóvenes de 19 a 24 años. Y eso no es lo peor: hay un 1.7% de menores en el país, entre los 12 y los 18 años, que ya habría usado, aunque sea por una sola vez, el peligroso estupefaciente sintético.

Cedro elaboró este informe tras realizar, a fines del año pasado, 3,280 encuestas a personas de entre 12 y 69 años en todo el país.

También se reveló que es muy frecuente la venta de pastillas de éxtasis falsificadas, las que, inclusive, son más peligrosas que las auténticas.

DE ALTO RIESGO. El éxtasis es un estimulante que causa, entre otras alteraciones, taquicardia, aumento de la temperatura corporal, mucha sed y, sobre todo, alucinaciones.

El doctor Alfonso Zavaleta Martínez-Vargas, jefe del Área de Investigaciones de Cedro, sostiene que el éxtasis, en combinación con el licor, puede ser mortal.

De acuerdo con el especialista, los padres tienen dificultades para detectar que sus hijos se encuentran en el mundo de esta droga.

LAS MUJERES. El consumo de estupefacientes en el Perú ya no es un problema estrictamente masculino. El tema, según el estudio de Cedro, se estaría «feminizando». Hoy, las mujeres serían, además de adictas a la marihuana y a la cocaína, consumidoras constantes de sedantes.