Gisella tenía 17 años cuando le ofrecieron por primera vez una pequeña pastilla de éxtasis. Era una tentación a la cual no podía negarse, por ser la prueba que debía pasar para mantenerse en su círculo de amigas. Ahora Gisella, con 26 años, se da cuenta de que esa no fue la mejor elección. Hace un año se deshizo de las pastillas que consumía para actuar desinhibida los fines de semana. “Veía cómo algunas personas que comenzaron a consumir al mismo tiempo que yo estaban acabadas, fatigadas. Entendí que podía encontrar alguna otra forma de ser feliz”, dice, aunque reconoce que en las fiestas de música electrónica la historia continúa con más adolescentes.
Devida alerta que un tercio de los muchachos que estudian secundaria no conocen las consecuencias que pueden causar las drogas en su salud. Si a este hecho le sumamos que en dos años la cifra de jóvenes que consumen drogas sintéticas, como el éxtasis o la ketamina, pasó de ser 2.000 a 20.000, la realidad se torna más preocupante.
Según Rómulo Pizarro, presidente de Devida, el 17,9% de los jóvenes que se han iniciado en el consumo de drogas lo han hecho con éxtasis. Eduardo Haro, gerente de Prevención y Rehabilitación de Devida, añade que de los 20.000 adolescentes consumidores, 6.000 son adictos.
PAÍS CONSUMIDOR
Pese al creciente uso de drogas sintéticas, la marihuana y la cocaína no dejan de ser las más comunes entre los escolares consumidores de narcóticos. “La marihuana ocupa el primer lugar con un 8% entre los adolescentes de 12 a 16 años”, informa Haro.
Además, el consumo de cocaína en nuestro país se ha elevado en las zonas productoras de coca. “Los escolares de San Martín, Huánuco, Ucayali, Junín, Ayacucho y Madre de Dios han incrementado el consumo de drogas cocaínicas en dos años en un 250%”, agrega el especialista.
Sin embargo, el consumo mayor sigue concentrándose en la costa. “Pero lo que nos preocupa ahora es que hay más droga en las calles, en todo el país. La demanda comenzó cuando en el Perú se empezó a producir cocaína como producto final”, agrega.
MEDIDAS PREVENTIVAS
Ante este peligro constante, la manera más efectiva de enfrentarlo es con la prevención. Al respecto, Devida y el Ministerio de Educación realizarán unos programas preventivos para los gobiernos locales y regionales.
Asimismo, esta semana Devida y la Dinandro presentaron el “Manual de prevención del consumo de drogas”, que se repartirá entre los docentes de los colegios vinculados a la Policía Nacional. El objetivo de la publicación es que los profesores dominen el tema y que enseñen a sus alumnos a ser promotores en prevención. “También estamos trabajando con el Minedu para dar un programa especial, con información en general, para los grupos de riesgo en los colegios”, añade Haro.
Milton Rojas, de Cedro, informó que esta institución participa en un proyecto con la Unión Europea y la Comunidad Andina para la capacitación de agentes de salud, de aduanas, de policía y de educación en lo referente a las drogas sintéticas.
REGIONES AFECTADAS
Según Devida, los estudiantes de secundaria que residen en Lima, Callao, La Libertad, Tacna y Moquegua son los que registran mayores niveles de consumo de drogas.