El Consejo de Gobierno aprobó en su sesión del jueves 1 de julio, a propuesta de la Consejería de Sanidad, el III Plan Canario sobre Drogas 2010-2017, que se configura como el instrumento de planificación y ordenación de las actuaciones que en materia de drogas se llevarán a cabo en la Comunidad Autónoma de Canarias durante este período y que será vinculante para todas las Administraciones públicas, entidades privadas e instituciones del sector.
Como cualquier otro Plan, ha habido un cronograma de remisión y recepción de informes preceptivos a diversos Departamentos, como la Viceconsejería de Medio Ambiente; la Dirección General de Recursos Económicos del Servicio Canario de Salud; el Consejo Económico y Social; la Dirección General de Planificación y Presupuestos; la Secretaría General Técnica de la Consejería de Sanidad; la Intervención General del Gobierno de Canarias o el Comité de Planificación y Programación. Una vez cubiertos todos estos trámites, el Plan se ha remitido a Consejo de Gobierno para, posteriormente, ser trasladado al Parlamento.
El nuevo Plan tiene entre sus fines, además de prevenir el uso de cualquier tipo de droga, reducir o disminuir al máximo sus riesgos y favorecer la sensibilidad social para su prevención, optimizar la gestión de los recursos públicos asignados frente a este problema, aplicando para ello criterios de eficiencia, y corresponsabilizar a la Administración Central del Estado, Gobierno de Canarias, Cabildos, Ayuntamientos, instituciones privadas, colectivos, asociaciones y particulares de las acciones destinadas a su atención.
De esta manera, la Consejería de Sanidad inicia una nueva etapa en el abordaje del fenómeno uso de drogas en Canarias que de respuesta a los retos que los nuevos patrones de uso consumo y usuarios de drogas van a requerir favoreciendo la corresponsabilidad entre los agentes públicos y sociales en la labor de intervención y garantizando la eficiencia en la asignación y gestión de los recursos presupuestarios.
El nuevo Plan Canario sobre Drogas
El III Plan Canario sobre Drogas ha sido elaborado por la Consejería de Sanidad, a través de la Dirección General de Atención a las Drogodependencias, al concluir el período de vigencia del segundo plan y de acuerdo a lo establecido por la Ley 9/1998, de 22 de junio, sobre Prevención, Asistencia e Inserción Social en materia de Drogodependencias, que considera que la actuación pública debe ir dirigida a la creación de un marco genérico que regule y arbitre los criterios básicos de actuación, así como las medidas y acciones que permitan una actuación efectiva en el campo de la prevención y la asistencia.
En el proceso de elaboración de este III Plan, la Consejería de Sanidad ha tenido en cuenta, por un lado, la experiencia y resultados de los dos planes anteriores y, por otro, la participación de los agentes sociales.
En este sentido, se analizó con carácter previo a su elaboración la evolución y tendencias del uso de drogas en las Islas y el resultado de las actuaciones implementadas para afrontar este problema en los últimos años, tanto por el sector público, como por los agentes y organizaciones sociales que intervienen en este campo. Desde este diagnóstico se llegó a la conclusión de mantener los criterios de actuación generales contenidos en los dos planes anteriores, para dar continuidad a las acciones que han demostrado ser efectivas, así como corregir aquellas que han presentado puntos débiles e incluir nuevas actuaciones y estrategias que den respuesta a las nuevas situaciones.
Asimismo, el nuevo Plan se elaboró siguiendo el proceso participativo que establece la Ley 9/1998, de 22 de julio. Para ello, utilizó la metodología de Investigación Acción Participativa (IAP), que se sustenta en un ejercicio activo de la ciudadanía siguiendo una estrategia fundamental de comunicación. La elección de esta metodología obedece a que las drogodependencias son un problema social y sanitario actual, que implica a todos y cada uno de los sectores de la población.
Por otro lado, la Consejería de Sanidad tuvo en cuenta los principales documentos de planificación nacionales e internacionales que están actualmente en vigor para redactar este nuevo Plan, como la Estrategia Nacional 2009-2016 y las Estrategias y Planes de Acción aprobadas por la Unión Europea, en particular la Estrategia Europea 2008-2016, además de los plantes sectoriales vigentes en la Comunidad Autónoma.
Objetivos del III Plan
Una vez realizado el diagnóstico de la situación sobre el uso y consumo de drogas en Canarias y la evaluación de las acciones realizadas en los últimos años, se han establecido siguientes objetivos estratégicos en el III Plan Canario sobre Drogas:
- Promover una conciencia social responsable sobre los problemas, los daños y los costes personales y sociales relacionados con el uso de drogas y la posibilidad real de evitarlos.
- Prevenir el uso de cualquier tipo de droga desde actuaciones globales de promoción de la salud y evitar o retrasar la edad de inicio del contacto con ellas.
- Reducir y disminuir al máximo el uso de cualquier tipo de droga incrementando la percepción de riesgo sobre su uso en aquellas personas que ya han tenido un contacto con ellas de forma ocasional o experimental.
- Garantizar una asistencia de calidad, coordinada, integrada y normalizada con los sistemas públicos de salud, servicios sociales y empleo, conjuntamente con la iniciativa social organizada y adecuadamente vertebrada, consolidando, ampliando y adaptando los programas de asistencia e integración social a las nuevas realidades y usuarios y mejorando los recursos en instalaciones, procedimientos, material y personal.
- Ofrecer una respuesta asistencial a las necesidades de todas aquellas personas directa o indirectamente afectadas por consumo de drogas, garantizando la situación de equidad respecto a otras enfermedades.
- Reducir o limitar los daños ocasionados a la salud de las personas que consumen drogas y, en general, los efectos sociales y sanitarios indeseables relacionados con su uso.
- Favorecer la sensibilidad y solidaridad con las personas con problemas de drogodependencias, facilitar la integración en su medio social y familiar y la participación activa en sus comunidades potenciando la colaboración y conexión de los programas de asistencia al drogodependiente con los de integración social y sociolaboral.
- Mejorar y asegurar la formación de los profesionales que trabajan en este campo, así como la dirigida a personas que colaboran voluntariamente en el mismo.
- Conocer de manera sistemática la evolución y el afrontamiento del fenómeno del uso de drogas.
- Impulsar la investigación aplicada para informar y orientar adecuadamente la toma de decisiones en esta materia.
- Potenciar la evaluación sistemática de programas y actuaciones, estableciendo para ello indicadores de calidad, eficiencia y eficacia.
- Reducir la accesibilidad a las drogas de todas las personas y en todos los ámbitos, colectivos y espacios de intervención en el marco de la Comunidad Autónoma.
- Establecer las líneas de actuación consensuadas a nivel de la Comunidad Autónoma en las diferentes áreas y para los diferentes ámbitos en la búsqueda de una mayor efectividad de los mismos.
- Contemplar la transversalidad, conexión y dependencia del III Plan Canario sobre Drogas con otros planes de carácter general o sectorial y coordinar desde el ordenamiento funcional y territorial las actividades que se promuevan y realicen desde las diferentes Administraciones y Organizaciones.
- Asegurar los recursos humanos, materiales, económicos, etc., tanto de carácter público como privado, que den viabilidad al plan, estableciendo los marcos de colaboración necesarios para ello.
- Implicar activamente a todos los ciudadanos en el abordaje del fenómeno de uso de drogas, concretando los objetivos, acciones y agentes implicados en las redes y estructuras participativas de trabajo en cada ámbito y nivel territorial, para que la sociedad en su conjunto sea parte activa en su solución.
Cambios en el consumo
Respecto a la situación actual del uso de drogas en Canarias, desde el diagnostico realizado por la Consejería de Sanidad se desprende que en los últimos años ha variado de forma importante los patrones y las formas de consumo y en especial el uso de la droga legal alcohol en fines de semana y de las ilegales cannabis y cocaína.
De entre los que las usan se observa un patrón de policonsumo cada vez más generalizado, precocidad en el inicio del uso de algunas sustancias y la relación cada vez más estrecha entre el consumo y los espacios y tiempos de ocio.
