• El programa cuenta con un equipo humano gestionado por la Fundación Canaria Sociosanitaria constituido por un psicólogo, un criminólogo y dos monitores, quienes trabajan conjuntamente con los equipos médicos, sociales y de tratamiento del propio centro penitenciario.

El director general de Atención a las Drogodependencias, Francisco Candil, realizó una visita de trabajo al centro penitenciario Salto del Negro, donde se reunió con los responsables médicos y de tratamiento del centro.

Francisco Candil también se reunió con los responsables de la Fundación Canaria Sociosanitaria que llevan a cabo el Programa Fénix, dirigido a la atención de drogodependientes internos y que está financiado por la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias.

Durante la visita se analizó el estado y las previsiones de los programas de intervención en materia asistencial y preventiva con los internos drogodependientes, así como el desarrollo de los programas de reducción de daños, concluyendo con una valoración muy positiva de las actuaciones que se vienen realizando en el centro.

En este sentido, Francisco Candil hizo hincapié en la importancia de acercar a los reclusos drogodependientes alternativas terapéuticas que favorezcan su reinserción, para lo cual señaló es necesario no sólo el buen funcionamiento y eficacia de los programas internos, sino también la coordinación con los juzgados y con los recursos específicos externos.

Candil también manifestó su compromiso de mejorar la realidad asistencial en el centro penitenciario en la medida en que la situación presupuestaria lo permita.

Programa Fénix

El Programa Fénix cuenta con un equipo humano gestionado por la Fundación Canaria Sociosanitaria constituido por un psicólogo, un criminólogo y dos monitores, quienes trabajan conjuntamente con los equipos médicos, sociales y de tratamiento del propio centro penitenciario.

Este recurso es un programa modular al que pueden acceder aquellos penados drogodependientes que voluntariamente quieren iniciar un tratamiento de rehabilitación. El programa presenta dos modalidades de intervención: el modelo libre de drogas y el de mantenimiento con sustitutivos opiáceos.

La modalidad libre drogas tiene como objetivo la derivación a un recurso extrapenitenciario, una vez que se ha conseguido la remisión temprana de los síntomas y justo cuando empieza la remisión sostenida de los mismos.

La modalidad de mantenimiento con opiáceos tiene como objetivo inicial la disminución atenuada de la metadona y se establece como medio para la posterior derivación a un recurso de drogodependencias extrapenitenciario.

Durante el pasado año estuvieron acogidos a este programa un total de 85 usuarios, de los cuales 55 participaron en la modalidad libre de drogas y 30 en la de reducción de metadona.

Por su parte, el centro penitenciario acoge un programa de dispensación de metadona que atiende a una media de 200 usuarios al año y que es gestionado directamente por Instituciones Penitenciarias.

El modelo de intervención del Programa Fénix se desarrolla tanto a nivel individual, como grupal y comunitario, trabajando y potenciando la autoestima y el proceso de cambio, la capacidad de comunicación y de relación y la integración en el medio.

Entre sus objetivos cabe destacar la realización de actividades de información y prevención; la coordinación con recursos comunitarios externos; así como generar conductas de abstinencia a drogas mediante la adquisición de nuevos hábitos, valores y actitudes saludables que favorezcan su reinserción en el medio comunitario exterior.

Algunas actividades llevadas a cabo incluyen actuaciones formativas, de ocio y tiempo libre y también de carácter ocupacional, destacando la numerosa participación de los internos en la realización de talleres, en cursos de educación para la salud, de sensibilización y de entrenamiento en habilidades sociales.

Este tipo de programas es fruto de la colaboración y coordinación entre organizaciones no gubernamentales, los propios centros penitenciarios y la Dirección General de Atención a las Drogodependencias, existiendo en la actualidad programas específicos en los centros penitenciarios de Salto del Negro y Tenerife II, en Gran Canaria y Tenerife respectivamente.

Con estas intervenciones se pretende aumentar la oferta de alternativas a los internos con problemas de drogas, de manera que permita su acercamiento posterior a la red asistencial y favorezca una reinserción normalizada.